Madrugador, el nuevo conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, llegó a las 8 horas de esta mañana al Álvaro Cunqueiro para escuchar de boca de los propios profesionales la situación en la que se encuentra el nuevo hospital y sus quejas sobre el funcionamiento. En la cita también estuvo acompañado por el gerente del Sergas, Antonio Fernández-Campa.

Uno de los primeros colectivos a los que se dirigió el titular de Sanidade fue al de celadores, acampados en el hall del complejo de Beade desde hace once días. Acordó con ellos una reunión en la consellería para abordar su problemática.

Vázquez Almuíña, que iba acompañado por el gerente del Chuvi, Félix Rubial, se reunió con la junta de personal para conocer sus demandas. Según el presidente de la Junta de Personal, Ángel Cameselle, los sindicatos trasladaron al nuevo conselleiro "todos los problemas detectados en los diferentes servicios".

Así, "se le informó de la suspensión de operaciones por falta de material, de los problemas en urgencias, de la falta de personal en algunas áreas, de las incidencias con las dietas, o los problemas con el aparcamiento". "El conselleiro se comprometió a estudiarlo todo, pero nuestra confianza en que se puedan solucionar estas cosas es limitada, porque se trata de un problema de modelo", ha apuntado Cameselle.

Modelo y desconfianza del gerente

El presidente de la Junta de Personal ha insistido en que, el motivo por el que el traslado al HAC está teniendo "consecuencias desastrosas", está vinculado al "modelo sanitario impuesto por Feijóo".

Finalmente, los trabajadores trasladaron al conselleiro su "falta de confianza" en el gerente, Félix Rubial, que fue increpado por varias personas durante su visita con el conselleiro, al grito de "¡Gerente dimisión!" "Le dijimos a Vázquez Almuíña que queremos hablar directamente con el presidente Feijóo, porque el gerente ha sido incapaz de dar respuesta a ninguna de las demandas que le planteamos", ha concluido.