El Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi) inició ayer la derivación de trasplantes de médula ósea a su homólogo compostelano. Tras dos meses con esta actividad suspendida a la espera de que concluyera el traslado al Hospital Álvaro Cunqueiro, Hematología indica que el problema está ahora en la falta de personal de Enfermería para atender las habitaciones de aislamiento. Los cuatro ingresos previstos entre el pasado viernes y este domingo se han suspendido y el servicio ha solicitado que los asuma el CHUS. Admisión del Chuvi ha aprobado dos de estas derivaciones y el primero ya ingresaba a las 20 horas de ayer en Santiago. El Sergas defiende que "la dotación de Enfermería es suficiente, con un ratio adecuado para prestar una atención de calidad" y señala que las derivaciones se realizan por los "criterios clínicos" que les traslada Hematología y rechaza especificar cuáles son estos.

A los pacientes trasplantados de médula ósea se les somete a un aislamiento muy restrictivo durante casi un mes para protegerlo, porque se queda sin sistema inmune. En esas condiciones, es muy arriesgado asumir el traslado de un paciente, por lo que el Sergas optó por suspender los trasplantes 30 días antes del inicio de la mudanza de hospitalización al Álvaro Cunqueiro. Así, se adelantaron todos los casos que fueron posible hasta el 25 de julio, día en que se suspendió esta actividad. Se preveía que esta situación se prolongara durante un mes, pero el parón de tres semanas en el traslado debido a las "alteraciones" detectadas en la calidad del aire, demoraron su reanudación. El primer ingreso estaba previsto para el 6 de septiembre, pero Hematología defiende que no podían iniciarlo hasta que se estuvieran disponibles UCI y quirófanos, debido al delicado estado de estos pacientes.

Así, una vez concluida la mudanza, programaron el reinicio de los trasplantes para la presente semana. Estaba previsto que ingresaran dos pacientes el viernes pasado, hoy un tercero y el domingo, un cuarto. Se han suspendido. Desde Hematología explican que no hay suficiente personal de Enfermería para atender las cinco habitaciones de aislamiento. Aseguran que ya avisaron de esta situación hace un mes y que la Dirección médica les garantizó que se solucionaría en cuanto se retomara la actividad, pero que no ha sido así.

Las cuatro derivaciones solicitadas a Santiago son casos que estaba previsto abordar en septiembre y que "ya no pueden esperar más". Antes del trasplante, a estos pacientes se les somete a tratamiento para tener "controlada" su enfermedad. Por ejemplo, en el caso de leucemia, se le aplica quimioterapia. El caso es que las sesiones no se pueden prolongar de forma indefinida y, cuando concluyen, no se puede demorar en exceso el trasplante porque puede volver a aparecer la enfermedad. Por ello se ha optado por desviar a Santiago. El servicio espera que el CHUS pueda absorberlas entre esta semana y la próxima. Estos enfermos estarán ingresados alrededor de un mes en Santiago, una distancia que supone un trastorno para las familias del área de Vigo.

El Chuvi acumula en su lista de espera para esta intervención a unas 18 personas. El complejo preveía resolver todos los casos antes de que concluyera el año, pero con un retraso de un mes en sus previsiones, los profesionales dudan de que puedan lograrlo sin la ayuda de otros hospitales de la comunidad.

Por otra parte, los equipos que trabajan en los quirófanos del nuevo complejo trabajan para resolver las "disfunciones" con las que se están encontrando. En la programación de cirugías, unos de los que más trastornos están causando son los problemas con el circuito de esterilización del material quirúrgico. Provocó la suspensión de intervenciones el viernes, el lunes y ayer. En concreto, el lunes se cancelaron las dos operaciones previstas de Ginecología después de que llegara el instrumental sucio hasta en dos ocasiones. El retraso en su llegada demoró más de dos horas otra de Urología. Ayer, afectó a Cirugía Cardíaca.

El Sergas desvincula estos problemas del traslado al Álvaro Cunqueiro y señala que, a la espera de que se abra la nueva unidad unificada de esterilización, se está siguiendo el mismo circuito, que pasa por lavar el material en el Xeral y esterilizarlo luego en el Meixoeiro. Regresa más tarde al Álvaro Cunqueiro en un servicio de transporte gestionado por la concesionaria Novo Hospital de Vigo. La nueva unidad de esterilización, que limpiará el instrumental para todo el Chuvi, se ubicará en el Meixoeiro. Las obras para adecuar el espacio ya han empezado. El Sergas en Vigo avanza que su equipamiento ha sido adjudicado provisionalmente y calcula que podrá ponerse en marcha a principios de 2016.