El gerente del área sanitaria de Vigo, Félix Rubial, compareció para confirmar que la fase final del traslado se retomará el próximo lunes, después de que los últimos controles ambientales arrojaran resultados "satisfactorios", tal y como avanzó ayer FARO. Con vistas a la reanudación de la mudanza y la puesta en marcha de los quirófanos del nuevo hospital, el Chuvi concentrará las cirugías de pacientes prioritarios en el Meixoeiro durante dos o tres semana.

El traslado al Álvaro Cunqueiro se retoma el próximo lunes con simulacros en sus quirófanos. El martes comenzarán las cirugías reales. En un inicio, estas serán sencillas. El incremento de la actividad y de su complejidad será "progresivo" y tardará entre 10 y 15 días hábiles en "normalizarse". Mientras tanto, se tratará de "minimizar el impacto" de esta mudanza reforzando "los recursos y la programación" en el Meixoeiro, que dará prioridad a los "pacientes preferentes".

Rubial garantizó que ni la mudanza ni este parón de tres semanas en el cronograma afectarán a las listas de espera quirúrgicas y que las que se publicarán al cierre del año serán "similares" a las de junio. A pesar de que una de las dos plantas de quirófanos del hospital Xeral permanece cerrada desde antes de que se suspendiera el traslado -el 28 de agosto- el gerente asegura que la actividad quirúrgica se está manteniendo en los niveles "habituales para esta época del año". Justifica que se vació esta planta para desplazar su equipamiento al Álvaro Cunqueiro y poder abrir este "con diligencia".

Con el traslado a Beade del área materno-infantil, las UCIs y las urgencias, el Xeral clausurará el jueves su torre -salvo las dependencias del laboratorio-. Según datos aportados del Sergas al cierre de la semana pasada, en este hospital hay unos 240 ingresados, un tercio del total en el Chuvi. La Administración calcula que tendrá que trasladar a 200 al Álvaro Cunqueiro, donde hay unos 230. La mudanza culminará el viernes 25 con el cierre de las urgencias del Meixoeiro.

De los 300 controles ambientales realizados en el nuevo hospital para garantizar la seguridad del aire una decena arrojaron resultados no compatibles con la actividad y en tres de ellos se detectó aspergillus en "pequeñas cantidades", según especificó el jefe de Medicina Preventiva, Víctor del Campo. "No es raro, lo raro sería detectarlo de forma reiterada", subrayó.

Obras de "ajuste"

Con respecto a las denuncias de riesgo por obras en el hospital, Rubial descartó que sean construcción y atribuyó los trabajos a "ajustes derivados de lo que nos plantean los propios servicios asistenciales" y que se refieren, principalmente, a la instalación de equipamiento que aún está por llegar desde el Xeral o el Meixoeiro, donde aún son necesarios. Del Campo aseguró que no se realizaron "en zonas críticas en ningún momento" y que estuvieron "vigiladas" cuando se realizaron en las "contiguas". En las necesarias por "dotación de equipamiento" en marcha el doctor la instalación de tomas de agua en la UCI. "Son cosas sencillas, en zonas cerradas, sin pacientes", abunda.

Por otra parte, Rubial aseveró que las quejas de los usuarios se refieren "fundamentalmente" a cuestiones de restauración, mientras que las de los profesionales son "solicitudes de pequeño caldo" sobre mobiliario y equipamiento informático y telefónico.