El alcalde Abel Caballero anunció ayer que el Concello se pone "a disposición" del Gobierno central para acoger a familias de refugiados en la medida en que el Ejecutivo y la UE "consideren".

El regidor se ha mostrado dispuesto a facilitar "acomodo y alojamiento en condiciones de dignidad", usando para ello recursos municipales de los fondos de cooperación previstos en el presupuesto.

"Vigo demanda al Gobierno español y a todos los gobiernos de la UE que respondan a las necesidades de asilo. Esta gente tiene que estar en domicilios, son seres humanos", sostiene el alcalde.

El anuncio coincidió con el cambio de postura de la Federación de Municipios de España, que pasó de criticar medidas de acogida como las propuestas por la alcaldesa de Barcelona a pedir que los regidores den "un paso al frente".