El Concello vigués es la segunda institución pública, entre 10.000 controladas en España, en celeridad en el pago a proveedores, con un plazo medio de 14 días en 2014, solo superada por Alicante. Además, el Concello hizo entre enero y junio pagos por 49 millones y el remanente de tesorería se sitúa actualmente en 58 millones. Los socialistas aprobaron ayer la cuenta general de 2014 mientras PP y Marea se abstuvieron. Muñoz criticó que la inversión municipal "se desplomó en plena crisis"; y Pérez indicó que su grupo "no ve el gasto social". Aneiros replicó que "parece que algunos viven en Marte" y afirmó que Vigo "es el número uno de los ayuntamientos de España en política social".