El Eixo Atlántico ha mostrado su disconformidad con la organización de la Cumbre Ibérica, que se celebrará en Baiona el próximo lunes, ya que, según denuncia, no contempla en su agenda la toma de decisiones sobre "temas relevantes", demostrando que la línea que separa España de Portugal es considerada "una frontera de segunda".
El secretario general del Eixo, Xoan Vázquez Mao, explicó que en el orden del día del encuentro no se refleja "ni un solo tema" de los planteados por las instituciones y empresas que conforman la denominada Red Ibérica de Entidades Transfronterizas (RIET), un hecho curioso teniendo en cuenta que este tipo de encuentros se organizan "para tomar decisiones".
Anualmente, la Red Ibérica de Entidades Transfronterizas envía a los responsables de la preparación de la Cumbre Ibérica, y a los propios jefes de Gobierno, un documento en el que se relacionan cuestiones a tratar para "incrementar la competitividad" del territorio de frontera entre España y Portugal. En el último escrito remitido, detallan diversas propuestas en materia de movilidad, infraestructuras, desarrollo económico, vertebración social y medio ambiente.
Vázquez Mao destaca de entre estas demandas la solicitud de creación de un grupo de trabajo que elabore un plan de movilidad transfronterizo, actuaciones de impulso al corredor de mercancías Sines/Lisboa-Vigo-Ferrol, la creación de una unidad de coordinación de emergencias y de un portal administrativo conjunto de información y tramitación para facilitar la creación de empresas al otro lado de la frontera.
El representante de la asociación transfronteriza pone especial énfasis en la solicitud de eliminación de las tarifas de itinerancia telefónica, solicitada por el Parlamento y la Comisión Europea para finales de este año.
Así las cosas, considera que la Cumbre Ibérica es un encuentro "fallido" y solicita que en la agenda se reflejen "temas relevantes" y no solo "presentaciones de delegaciones" ya que, abunda, "hay material".
