El Concello completará en sucesivas fases las piezas que faltan para renovar todo el eje entre Areal, Rosalía de Castro y Rosalía de Castro García Barbón, una de las manzana más céntricas pendientes de remodelar. El gobierno local ha trazado un plan integral por un importe cuantificado en siete millones que incluye no solo las dos arterias principales (Areal ya está renovada al completo), sino todas las calles transversales en las que todavía no se ha actuado desde el cruce con Pontevedra hasta la rotonda de Isaac Peral.
El tramo central de Rosalía, entre República Argentina y Canceleiro, fue inaugurado hace diez días tras una obra realizada en tiempo récord, algo más de cuatro meses, que incluyó no solo la renovación y ensanchamiento de las aceras, la sustitución de las canalizaciones subterráneas y la instalación de mobiliario, sino también la construcción de dos rotondas para regular el tráfico en Canceleiro y Oporto respectivamente. La primera está presidida por una escultura de José María Barreiro y la segunda por un olivo. La remodelación costó 1,3 millones con cargo al presupuesto municipal. En esta calle se prevén otras dos fases: entre Pontevedra y República Argentina, por 700.000 euros, y entre Canceleiro y Serafín Avendaño por 900.000. Desde esta última a García Barbón el tramo es de reciente construcción al formar parte de la urbanización residencial Rosalía de Castro II.
Paralelamente, con fondos de Aqualia dentro del plan para la prórroga del contrato con la empresa concesionaria hasta 2020, se renovó en los últimos meses una de las aceras de García Barbón entre la iglesia de Santiago de Vigo y el Club Financiero. Quedó pendiente la de enfrente, que se acometerá a partir de julio, según fuentes de la Concejalía de Fomento. Completar la puesta al día del resto de la calle hasta Isaac Peral está cuantificado por los técnicos en 1,8 millones.
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Zona arqueológica
Entre Areal y García Barbón faltan por renovar la mayor parte de las transversales. Oporto está humanizada al completo, al igual que Canceleiro entre Areal y Rosalía. La próxima obra en el calendario es el tramo bajo de Pontevedra, presupuestada en 800.000 euros y pendiente de la autorización de la Dirección Xeral de Patrimonio para poder realizar sondeos. Rosalía es una zona rica en restos arqueológicos por lo que todas las obras están sujetas a controles. El mismo trámite resta para ejecutar el trecho de Canceleiro entre Rosalía y García Barbón. El comienzo es "inminente", según fuentes municipales.
Serafín Avendaño será renovada en su integridad y ya está el proyecto redactado, al igual que la siguiente fase de Rosalía entre Canceleiro y Serafín Avendaño. Heraclio Botana y Roupeiro también forman parte del plan. Con la manzana al completo faltará el último tramo de García Barbón desde la rotonda de Isaac Peral hasta el entronque con Sanjurjo Badía, una obra presupuestada en dos millones y prevista a continuación. Todas las actuaciones seguirán el mismo modelo con aceras más anchas en granito, sustitución de las redes de abastecimiento y saneamiento e instalación de mobiliario, jardineras y alumbrado. En García Barbón se ensayará un modelo de calle inteligente, además de dotarse de aparcabicis y bancos con conexión de carga para móviles y tablets.
