"Hay ilusión porque conlleva mucho trabajo"

"Todos los años esperamos esto con mucha ilusión porque conlleva mucho trabajo", destaca Manuel Núñez, presidente de la Cofradía Nuestro Padre Jesús del Silencio, Virgen de la Amargura y Cristo de la Fe, formada por cerca de 150 cofrades.

La maquinaria para tener a punto todo para Jueves y Viernes Santo comienza semanas atrás. Toca limpiar, preparar los carros donde irán colocadas las imágenes y, durante la semana que empieza mañana, pulir los detalles. "Desde 1946 no faltamos, tenemos el honor de decirlo", destaca Nuñez, que comenzó a participar en la hermandad desde la adolescencia.

Antonio Vidal, por su parte, se incorporó poco después de su fundación. Tiene ahora 82 años y más de 60 los ha dedicado a colaborar en la Semana Santa. La larga trayectoria no le resta un ápice de ilusión. "Estamos un poco viejos pero seguimos con fuerzas, nos gustaría que hubiera relevo, esperemos que venga", explica Vidal.

Ambos no dudan en manifestar su satisfacción por que todo el trabajo que realizan logra movilizar a mucha gente los días de procesiones pese a las características especiales de la ciudad. "Vigo es muy particular, una zona industrial y la gente aprovecha estas fechas para marcharse al pueblo, de vacaciones. Sin embargo, vemos que cada vez se incorpora gente, reconforta que el trabajo mueva tanta", destaca el máximo responsable de la cofradía, que esta semana descolgará de la iglesia de Santiago de Vigo las imágenes para sus pasos.

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