José Antonio Jiménez y Asun Fernández son vecinos de la calle Zamora. Ayer al mediodía paseaban por el número 66 del barrio Hispanidad cuando se fijaron por primera vez en el colorido mural -de varios metros de altura- que el artista Liqen pinta desde el pasado jueves en una medianera, con ayuda de una grúa. Tras casi una semana de trabajo continuo las formas, tonos y composición del diseño empiezan a adivinarse. "Es muy bonito, le da vida a toda la zona", reconoce José Antonio, contento con el programa del Concello que ya embellece una docena de muros y fachadas similares en otros tantos puntos de la ciudad. "En otros sitios, como en Navalcarnero, hay muchos murales", comparte Asun.

La opinión que tienen José Antonio y Asun sobre los murales no es un caso aislado. Vecinos de los barrios en los que se están decorando paredes o medianeras reconocen que las pinturas embellecen la ciudad y "le dan vida". "Es una iniciativa muy bonita, por el resultado y porque permite a los artistas expresarse", anota Guillermo Gesteiro, quien trabaja en un bajo situado en el número 66 de la calle Hispanidad, quien insiste en que los pintores "tienen mucho mérito".

La mayoría de los artistas empezaron a trabajar en sus murales el jueves de la semana pasada. El de "Ewa", en Navia, ya está listo. Otros, como el de Vía Norte, la sede vecinal de Lavadores, el entorno de la Pinacoteca, Blein Budiño o el cruce de Gregorio Espino con Urzáiz están muy avanzados. Tras los trabajos de preparación, se espera que hoy arranque el de Don Quijote.