Los grafitis salen de los edificios en ruinas, fachadas y muros escondidos o taludes del extrarradio para empapar con orgullo la piel de la ciudad. Los sprays, pinturas, pigmentos... se filtran a través de los poros de Vigo y enriquecen su personalidad, en la mejor versión del street art que ya da lustre a urbes cosmopolitas de todo el globo, como Lisboa, Buenos Aires, Nueva York, La Habana, Bruselas o Berlín, que reciben cada año un reguero de amantes del arte urbano.

Desde el viernes una decena de artistas se afanan en medianeras, fachadas y muros de toda la ciudad -desde Lavadores o Vía Norte hasta Teixugueira- para decorarlas con sus diseños. La iniciativa -ideada y financiada por Concello- persigue un doble objetivo: embellecer el casco urbano y poner en valor el talento de artistas locales. En el programa participan pintores consagrados, como Nelson Villalobos, Xavier Magalhaes o Darío Basso; nuevos creadores, como Elisa González -de 23 años, la más joven- e ilustradores del prestigio de Liqen, Epi, Pelucas o Ash Santos Hermo. "Es la nueva cultura de las humanizaciones", apuntaba esta misma semana el alcalde, Abel Caballero.

La iniciativa ilustrará en total 13 fachadas y muros de Vigo -ayer los artistas continuaban trabajando en ocho de ellas-, que se sumarán a la gran lona con una réplica del lienzo "Fiestra", de Lugrís, que se colgó el pasado verano en Príncipe; o nuevos proyectos artísticos, como el mural de 56 metros de largo -obra de Villalobos- que desde esta semana decora la nueva plaza de Martínez Garrido; el diseño de Antón Pulido que presidirá la futura plaza de Peniche; o los grafitis que ya dan brillo a los depósitos de Aqualia, situados en O Castro.

Vigo da así un paso de gigante en la senda del street art, una filosofía que algunas de las ciudades más importantes de Europa, como la capital lusa, han convertido en una genuina seña de identidad. El consistorio lisboeta dispone incluso de una oficina propia -la Galería de Arte Urbana- encargada de localizar paredes sobre las que pintar, encontrar y convencer a sus propietarios... E incluso catalogar como legado de la urbe los grafitis que decoran sus muros.

Otra ciudad que ha visto un filón en el street art para recuperar espacios degradados es Madrid. El Ayuntamiento de la capital ha diseñado una iniciativa -"Paisaje Madrid"- para decorar muros y fachadas, mano a mano con colectivos de artistas y vecinos. El pasado diciembre, por ejemplo, lanzó actuaciones en Usera y Villaverde.