Empleados bancarios imputados en Las 5 Jotas declaran que obedecían órdenes de sus jefes

El Juzgado de Instrucción 6 de Vigo afronta el último tramo de la causa central de Las 5 Jotas con las declaraciones de los directivos y empleados bancarios imputados por dar supuesta cobertura a la considerada mayor trama de fraude fiscal mediante la emisión de facturas falsas destapada en Vigo y que afecta a más de 200 empresas de toda Galicia. Y es que, según defiende desde el principio del proceso la defensa de José Manuel Costas, jefe del grupo empresarial vigués que emitía las facturas, nada pudo hacerse sin la colaboración de los bancos: José Manuel Costas llegó a sacar 380.000 euros al día en pagarés para devolver el dinero a las empresas y abrió cuentas a nombre de autónomos sin su consentimiento.

Durante la jornada de ayer declararon dos trabajadores de La Caixa: una empleada contratada a través de una ETT manifestó que ella se limitó a realizar lo que decían sus superiores, mientras que un responsable de la oficina admitió ciertas irregularidades. Expuso que le ordenaron cierto trato de favor a José Manuel Costas, como abrirle y atenderle antes o después de cerrar la puerta de la sucursal, pero también que se le pagaban los pagarés en el día aunque fuera de una cuenta distinta cuando lo habitual son dos días. Al igual que otros imputados, negaron actuar de espaldas a sus superiores jerárquicos si bien las órdenes se las dieron de forma verbal. Una empleada, no obstante, declaró en el juzgado que pidió permiso por escrito a su entidad sobre las irregularidades que le parecía se estaban cometiendo. Aunque no recibió respuesta escrita, la entidad conocería por ella el procedimiento que se utilizaba.