Antía Cal recibió ayer el reconocimiento a una vida de trabajo y esfuerzo en el ámbito de la enseñanza. La pedagoga nacida en La Habana recogió el III Premio de Igualdade Ernestina Otero en el salón de actos del museo Verbum, en un acto que tuvo que aplazarse por un contratiempo personal de la homenajeada hace dos semanas, cuando estaba encuadrado dentro del programa de la celebración del Día Internacional de la Mujer y que tuvo lugar finalmente ayer.

Cal ve premiada de esta manera una trayectoria encomiable. Con su trabajo, consiguió fundar a principios de la década de los 60 en Vigo la Escola Rosalía de Castro, convirtiéndole en un centro mixto, laico, igualitario y abierto con enseñanza en inglés, gallego y castellano. Un modelo que, en la actualidad, parece normal, pero que fue construido en una época en la que prevalecía otro modelo muy diferente.

A raíz de que se conociese el reconocimiento del Concello, anunciado por la concejala Isaura Abelairas, a Antía Cal, la pedagoga no pudo ocultar su emoción y el agradecimiento por el nombramiento.