Si el Partido Popular había dinamitado ya por la vía de los hechos su propio discurso de coordinación aeroportuaria, el alcalde de A Coruña, Carlos Negreira, se encargó ayer de darle el tiro de gracia. Y lo hizo no solo sellando un nuevo acuerdo económico con una aerolínea (Iberia), sino triplicando un destino por el que su mismo partido ya paga en Lavacolla y, lo que es más grave, que opera en Vigo desde hace más de una década sin ningún tipo de ayudas: París.
Negreira cerró el acuerdo a través de un convenio de promoción con la aerolínea cuyo coste omitió cifrar y que incluye la apertura también de un enlace a Valencia -destino operado ya por Volotea en Vigo durante el verano, pero también por la subvencionada Ryanair en Santiago- y un aumento de plazas en la ruta a Madrid. "El acuerdo de promoción de la ciudad nos permitirá llegar a más de tres millones de personas. A Coruña va a estar visible para conseguir más turismo y más congresos", enfatizó Carlos Negreira acompañado por la concejala de Turismo, Luisa Cid; y los directores de Ventas y Comunicación de Iberia, Víctor Moneo y Juan Cierco.
Pero esta no es la primera vez que Carlos Negreira hace lo contrario de lo que dicta su partido desde la Xunta y actúa por libre en favor de Alvedro para contrarrestar la competencia subvencionada que, al igual que Peinador, sufre desde Lavacolla, aeropuerto también beneficiario de ayudas por los gobiernos del PP, antes autonómico y ahora municipal. Hace dos años, cuando el exconselleiro de Infraestructuras y ahora alcalde de Santiago, Agustín Hernández, llamó a la coordinación, su compañero de partido hizo caso omiso y tiró de talonario. Lo hizo pagando 1,4 millones de euros a Air Europa para que volara a Madrid. Este acuerdo no solo afectó seriamente a la conexión a Barajas desde Lavacolla, sino que llevó a la aerolínea a tener que reorganizar su flota. Y Peinador fue el más afectado, ya que eliminó sus aviones grandes de 122 plazas que se llevó para Alvedro y los sustituyó por turbohélices de solo 68 asientos en Vigo. Ahora, una vez más y a las puertas de las Elecciones Municipales, actúa al margen y cierra una ruta que funciona históricamente con Air France sin ningún tipo de ayuda en Vigo y que opera ya también la subvencionada Vueling en Santiago.
Con este nuevo acuerdo en A Coruña, el gobierno local herculino cierra el círculo de las subvenciones, y es que ya todas las compañías del aeropuerto de A Coruña reciben ayuda pública. Hasta ahora estaban financiadas la portuguesa TAP, Vueling y Air Europa. Desde ayer, también Iberia.
Pero las incongruencias de los gobiernos del Partido Popular en materia aeroportuaria van más allá de pedir coordinación y que luego sus alcaldes actúen por separado subvencionando aerolíneas. Y es que además lo hacen pagando por las mismas rutas. El único vuelo internacional que operaba hasta ahora en Alvedro al amparo de la ayuda municipal a Vueling, Londres, lo financiaba también el PP desde la Xunta en Lavacolla y ahora desde el Concello. Alvedro suma París, ruta que el Ejecutivo autonómico llegó a financiar en Santiago pese a operarse en Vigo sin ayudas y que actualmente explota también la compañía Vueling con la que Agustín Hernández admitió haber firmado convenios de colaboración junto con Ryanair, Swiss o Turkish Airlines.
El vuelo A Coruña-París comenzará a operarse el próximo 31 de marzo con solo una frecuencia semanal (martes). "Se trata de un vuelo internacional con vocación de permanencia. Se suma a dos hubs como Lisboa y Londres-Heathrow", subrayó Negreira sobre las tres rutas internacionales que subvenciona en Alvedro. La de Valencia está previsto que comience a operar el 27 de octubre con un avión en cada sentido los martes y jueves. Con estos nuevos enlaces y el aumento de plazas en la ruta a Madrid Iberia aumentará en 60.000 plazas anuales su oferta desde Alvedro.
