Empezó a sacar notas de oído a los 5 años y se empeñó en acudir a clases de órgano. "Era gracioso, porque ni siquiera me llegaban los pies a los pedales", recuerda Juan Eiras, un compositor al que Roberto Relova, exdirector del Conservatorio Superior de Música de Vigo, enmarcó en la "Xeración sensible".

Junto a Gloria Rodríguez Gil, Ramón Souto y Emilio Lede, entre otros, Eiras integra una generación de "compositores con una alta preparación académica y gran compromiso con su realidad social" que no pudieron aprender de su generación precedente, debido al temprano fallecimiento de sus principales representantes, Enrique Macías, Manuel Balboa o Xan Viaño. De los sensibles, Relova destaca que , como creadores de música contemporánea, "han logrado reconciliarla con el público, encontrando la conexión a través de la búsqueda de la belleza". A Eiras lo define como un "modelo de entrega, sacrificio y esfuerzo".