No solo los accidentes colapsan el puente de Rande, el aumento de la intensidad de tráfico en dirección a las playas, también. Ayer volvieron a salir a la luz una vex más las carencias del puente que conecta ambos márgenes de la Ría. Desde las doce del mediodía comenzaron a producirse las primeras retenciones. La cola de vehículos en dirección a Pontevedra llegaba casi hasta el centro de la ciudad y traspasaba los túneles de A Madroa. Sobre el asfalto no había ningún siniestro, como en otras ocasiones, sino simplemente más tráfico del habitual.
La celebración del puente por el festivo del Día de Galicia, unido al buen tiempo, provocó un desplazamiento masivo de personas hacia las playas de O Morrazo. La rotonda que regula la salida de la AP-9 y el Corredor no fue suficiente para dar fluidez a tanta intensidad de tráfico y los coches comenzaron a "amontonarse" hasta colapsar el puente y la salida de Vigo por la autopista AP-9.
Pero según varios testigos que se vieron "encerrados" en este atasco, la concesionaria de la autopista no habría ni siquiera advertido de esta situación en los accesos a la vía de pago. Una circunstancia por la que se quejaron multitud de usuarios y que, si se les hubiera advertido, no habrían utilizado esta alternativa para cruzar la Ría.
De hecho, y por situaciones como esta, el propio presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, animó esta semana a los usuarios de la AP-9 a presentar quejas a la empresa concesionaria. "No los podemos aceptar", remarcó el titular del Ejecutivo gallego en relación a los atascos en la autopista que vertebra Galicia de Norte a Sur.
