El comportamiento demográfico de Vigo empieza a mostrar signos preocupantes. El Instituto Nacional de Estadística (INE) registra el descenso más abrupto de cuantos se han producido hasta el momento en el municipio y rebaja a 294.910 vecinos la cifra provisional de población actualizada a 1 de enero de 2014. La celebración de las elecciones europeas retrasó este año el envío de los datos a cada ayuntamiento. Las cifras del organismo estatal, las oficiales y las que computan a efectos de transferencias y subvenciones, nunca coinciden con el padrón municipal que elabora el Concello de Vigo. Pero la brecha entre las dos magnitudes crece todavía más en esta ocasión hasta un diferencial de 3.264 personas. Los servicios municipales de estadística tienen registrados en la ciudad a un total de 298.174 vecinos que colocan a Vigo mucho más cerca del objetivo histórico de los 300.000 habitantes que la estadística nacional.

El INE sitúa la población viguesa en niveles de hace siete años. Para hallar un balance tan bajo hay que retroceder hasta el año 2007, cuando la primera ciudad de Galicia cerró el ejercicio con 294.772 vecinos confirmados. Desde entonces atravesó un lustro de continuo crecimiento hasta que en el año 2012 y con la crisis de la industria tocando techo se perdieron casi 900 habitantes en un solo año. Esta era la mayor caída registrada en el censo. Hasta ahora. La cifra oficial de población de Vigo desciende esta vez desde los 296.479 habitantes del año pasado hasta la cifra provisional de 294.910 con la que se trabajará hasta diciembre, un total de 1.569 menos.

El dato queda a expensas de las alegaciones que presente el Ayuntamiento, aunque las correcciones que se admiten en Madrid suelen ser mínimas. En ningún caso el ajuste permitiría salvar la brecha de 3.264 personas que separan el censo del padrón municipal, siempre más alto por los retrasos que pueden producirse para dar de baja a algunos inmigrantes, trabajadores que se mudan de ciudad y se empadronan en otra o fallecidos.

El cómputo municipal sigue siendo mucho más alto que el realizado por el INE, pero coincide en lo esencial: la población de Vigo está mermando. La diferencia crucial es el ritmo al que esto se produce, ya que la administración local apenas detecta un retroceso del 0,09% en el último año mientras que el censo estatal eleva la pérdida a un 0,5% de la población total.

Esta caída es común a la mayoría de las grandes ciudades y está directamente relacionada con la situación económica y la búsqueda de vivienda y servicios más baratos, lo que lleva a algunas familias a alojarse temporalmente en municipios próximos.

El dato más positivo de las estadísticas municipales es la juventud de la población viguesa. Hay 41.593 empadronados por debajo de los 15 años y otros 12.469 vecinos entre esta edad y la veintena. El 54% de la población de la ciudad tiene menos de 45 años mientras que se mantiene en un 18% el grupo que supera la edad de jubilación. Son 55.565 los residentes por encima de los 65 años y un pequeño grupo de algo más de dos mil los que han coronado los 90, según datos facilitados por el Concello.

Niños en Lavadores y Florida

Del análisis por distritos se desprende que el más populoso es el 7, que abarca parte del Calvario, Travesía, San Roque, A Doblada, Pardavila, Ceboleira, Barreiro y Cabral. En este entorno residen 58.917 personas, ligeramente por encima del distrito 4, delimitado por Beiramar, calle Coruña, Praza América, Coia, Alcabre, Florida y Balaídos. En esta amplia zona tienen su residencia medio millar de vigueses, según las estadísticas municipales. Por el contrario, los distritos con menos presión demográfica siguen siendo el 5 -Freixeiro, Traviesas, Castrelos, Raviso e Isaac Peral- y el 8, al que pertenecen las parroquias de Matamá y Bembrive¡ y las zonas de Gándara, Garrida y Alcabre.

Como cabría esperar, los distritos con más población son dos de los que concentran mayor tasa de natalidad, con 3.081 niños de cero a cinco años en el área de Lavadores y por encima de los 2.500 en el 4.En términos globales, el distrito más envejecido es el 2, zona centro comprendida entre Ecuador, Urzáiz, Gran Vía, Vázquez Varela, Ribadavia y Travesía. En el extremo contrario se sitúa el 9 debido al empuje del polígono de Navia.

La población viguesa que ha crecido a un ritmo constante desde mediados de los noventa no es ajena a la grave crisis demográfica que atraviesa Galicia y el conjunto del país debido a la caída de la natalidad y al retorno de población inmigrante a sus lugares de origen. La falta de oportunidades laborales expulsa de la ciudad olívica a los gallegos del interior que se mudaron a las ciudades más industrializadas y a familias inmigrantes que llegaron con la intención de ganar calidad de vida y ahora tiene difícil mantener unos ingresos.

Ambas realidades están repercutiendo de forma directa en la demografía viguesa. La mitad de la población que pierde son españoles y la otra mitad extranjeros. En apenas un año el municipio ha visto cómo la crisis forzaba a casi un millar de inmigrantes a regresar a sus países. Lo han hecho con mayor celeridad los procedentes de algún país sudamericano, lo que por primera vez sitúa a los ciudadanos procedentes del continente europeo como el grupo más numeroso por encima de los americanos por un estrecho margen.

En Vigo residen ahora mismo 7.206 inmigrantes europeos frente a los 7.019 americanos, que sufren una importante caída respecto a los 8.118 compatriotas identificados un año antes. El descenso es todavía más abultado si se compara con la cifra récord alcanzada en el año 2010. En esa fecha llegaron a vivir en la ciudad 9.740 inmigrantes americanos, la mayoría procedentes de Brasil, Colombia, Uruguay, Argentina, Paraguay o Perú. Son los tres primeros grupos los que han sufrido retrocesos más importantes en los últimos doce meses. En 2013 residían en el municipio un total de 1.701 brasileños frente a los 1.506 actuales. En el caso de Colombia, su población en la ciudad pasa de 1.070 a 877, según la última estadística del padrón municipal.

La población inmigrante cae en un año de 17.391 a 16.543, con un total de 6.878 comunitarios y 10.513 no comunitarios. En 2014 los inmigrantes europeos son los más numerosos y como cabría esperar Portugal ocupa la primera posición con 3.058 vecinos residiendo en el municipio, seguido por los 1.541 procedentes de Rumanía y, ya a mucha distancia, por italianos -823- y franceses -400-.

38 países africanos

La crisis también hace menos atractiva la comunidad gallega y Vigo de forma particular para la población africana, que se mantiene prácticamente estancada desde hace cuatro años. Ahora mismo computan en el padrón municipal un total de 1.578 vecinos de nacionalidad africana: 1.092 hombres y 486 mujres. Senegal continúa como principal país emisor, con 595 personas, seguida de Marruecos, Nigeria y Ghana. Son la comunidad más fragmentada y proceden de hasta un total de 38 países, algunos con una presencia muy testimonial como Benin, Burkina Fasso, Djbuouti, Gabon, Togo o Uganda con tan solo un vecino empadronado.

Los inmigrantes asiáticos se mantienen en las mismas cifras que en 2013 y por primera vez, eso sí, se detecta un freno en la llegada de personas de nacionalidad china. Ahora mismo quedan 485 en Vigo cuando hace doce meses se contabilizaban 489. Hay además 74 residentes que proceden de Pakistán, los mismos que hace un año, y 45 filipinos. La presencia de la otra veintena de países es muy baja y sin incidencia estadística.