El fiscal pedía casi 5 años de cárcel, pero la juez de Penal 2 de Vigo acaba de dictar una sentencia absolutoria en la que llega a calificar de "increíble" la versión de la víctima. Se trata del caso de V.M.C., un ciudadano rumano que estaba en prisión provisional al acusarle la Fiscalía de obligar a a su pareja a prostituirse y de maltratarla, utilizando supuestamente al hijo de 7 años que tienen en común para chantajearla y forzarla a que ella le enviase dinero semanalmente. La juez sin embargo, en coincidencia con lo que pedía la defensa, lo absuelve de los delitos de inducción a la prostitución y maltrato en el ámbito familiar por los que se sentó en el banquillo.
La magistrada ve probado que en 2011 el ahora absuelto y su pareja se trasladaron a Vigo, donde ella ejerció la prostitución en dos locales "sin que conste fuera obligado a ello" por el acusado, que vivía entre Rumanía y España. La mujer hizo en 2012 transferencias de dinero al imputado por 20.000 euros, pero la juez no ve probado que él la agrediese o amenazase para que ella entregase el dinero, ni que usara a su hijo para chantajearla. El fallo refiere que no hay pruebas de los delitos y se califica el testimonio de la víctima y de una amiga de "vago e impreciso" y en algunos aspectos hasta "increíble".
