Más motos pero menos accidentes. El continuo aumento de motocicletas y ciclomotores durante los últimos años no ha provocado un aumento de los siniestros, sino todo lo contrario. La Policía Local contabilizó en 2007 más de 1.100 siniestros de vehículos de dos ruedas. En 2013, y pese a haberse duplicado el número de unidades, solo hubo 681.

Las mejoras para reforzar la seguridad en determinadas calles ha contribuido a este descenso. Pero también la concienciación de los conductores y el cambio de perfil de los pilotos. "El joven adolescente en ciclomotor, sin casco y haciendo caballitos ha desaparecido prácticamente", apuntan fuentes de la Policía Local. Por el contrario -agregan- están aumentando los usuarios más veteranos y responsables. Esta hecho no solo se debe a la posibilidad que abrió Tráfico de conducir motos hasta de hasta 125 centímetros cúbicos con el carné de coche y sin necesidad de examen, sino también a la crisis y el ahorro -tanto económico como de tiempo- que permite la moto en ciudad.