Vigués del Calvario y vigués militante. Juan Antonio Muñoz Codina, director de la factoría PSA Peugeot-Citroën, fue el encargado de leer el pregón de la Reconquista en el Centro Cultural Novacaixagalicia. Su discurso, cargado de "viguismo" por los cuatro costados, apeló a la capacidad de la ciudad para avanzar, a su carácter acogedor y a su "caótico encanto", pero también utilizó la ironía para recordar que hace 200 años fueron expulsadas las tropas francesas y hoy en día trabajamos para que se queden, en relación a la planta de la multinacional gala que ahora dirige en Balaídos.

"Yo soy vigués militante", comenzó declarando . "Nací aquí, en el Calvario, y estudié aquí, en los Maristas -dijo dirigiéndose al director del colegio, Carlos Formigo- y en la Universidad. Ahora también trabajo aquí, en una fábrica que es el emblema de la industrialización y el progreso de Vigo", aseguró tras declararse "enormemente honrado" por leer el bando de la fiesta.

Codina describió Vigo como una "ciudad aluvión" por su rápido crecimiento en los años 60. "Acogió a todo aquel que llegaba atraído por su pujante industria y estas son precisamente las gentes que hicieron posible, al abandonar su lugares de origen, el milagro de la eclosión de Vigo, un poco caótico, es verdad, pero eso, para los que amamos Vigo, es parte de su encanto", señaló.

Muñoz Codina recordó brevemente la historia de la urbe y los acontecimientos que le concedieron su título de ciudad Leal y Valerosa, concedidos por Fernando VII tras la Reconquista, y posteriormente, el de Siempre Benéfica, por acoger a los soldados malheridos en la Guerra de Cuba a finales del siglo XIX.

"Ahora es, sin duda, el motor económico de Galicia. Es audaz y responsable, emprendedora, con empresarios tenaces y esforzados", indicó. "Paso a paso, con audacia y responsabilidad reconquistamos nuestro futuro y en el sector de la automoción, al que doy voz, lo tenemos muy interiorizado", explicó.

El director de PSA también aprovechó su intervención para realizar un llamamiento por el progreso de la ciudad. "Hoy quiero reivindicar el futuro. Estoy convencido de que se trata del mejor homenaje que se puede rendir a todos aquellos que con tampoco hicieron tanto. Leal y Valerosa, sí, pero también audaz y responsable. Vigo avanza detrás de su destino. Y nosotros, descendientes de aquellos luchadores, tenemos la obligación de gestionar todo este patrimonio con la dignidad y el rigor que demandan las generaciones futuras", dijo Muñoz Codina.