Los requisitos de la Dirección Xeral de Patrimonio para dar su aprobación al plan especial del Barrio do Cura, donde el exfutbolista y promotor Valery Karpin proyecta una urbanización con 350 viviendas, ya están incorporados. El departamento autonómico emitió informe favorable hace un mes condicionado a introducir esos cambios, y el Concello quiere tener todas las garantías de que el documento completo se ajusta íntegramente a lo solicitado por lo que, antes de llevarlo a pleno, lo remitió el jueves de nuevo a Patrimonio para que lo supervise. Una vez que obtenga el ok definitivo, trámite que no debería ofrecer complicación alguna según señalan fuentes municipales, la Gerencia de Urbanismo lo votará y será ratificado en el pleno de la Corporación este mes si no se produce ningún retraso.

Patrimonio centraba sus requisitos en la integración de la fachada de la iglesia del antiguo asilo de Pi y Margall, la solicitud de más información arqueológica y las garantías de que la urbanización va a mantener las vistas del mirador del Paseo de Alfonso. El arquitecto autor del proyecto, Alfonso Penela, entregó toda la documentación para justificar el cumplimiento de estas condiciones, y el 5 de febrero la dirección xeral emitió informe favorable. En las semanas siguientes Penela integró los cambios en el plan para darle la forma definitiva.

El tiempo para llevar a pleno el plan dependerá de lo que tarde Patrimonio en supervisar que todo esté en orden, una cuestión que fuentes municipales consideran de puro trámite. A ello ayuda la estrecha colaboración entre los técnicos de Urbanismo del Concello y los de Patrimonio para agilizar el proyecto. Una vez que el departamento de la Xunta haga las comprobaciones pertinentes será cuestión de días que la Corporación lo apruebe.

Este último paso es clave para salvar el plan de Valery Karpin&Asociados, que aún deben resolver sus problemas bancarios y cerrar el acuerdo con el inversor ruso que está interesado en participar en la operación.

El BBVA y el Santander han dado un voto de confianza al proyecto al considerar que aún es viable y suspendieron las subastas de terrenos que habían instado por impago de créditos. De celebrarse las pujas el plan para el Barrio do Cura quedaría definitivamente enterrado. El Santander paralizó los procedimientos hace un año mientras que el BBVA estuvo a punto de ejecutar la venta de parcelas, viviendas y el antiguo asilo por un importe conjunto superior a los 18 millones de euros. La paralizó in extremis tras dar garantías el promotor de que la operación es viable con la participación del inversor ruso, que presentó cartas de compromiso.

"La negociación con los bancos está muy avanzada y se cerrará en cuanto el plan esté aprobado en el pleno", comentan fuentes de la promotora, que estiman que "entre marzo y abril" el proceso quedará resuelto.

El proyecto incluye, además de la construcción de las viviendas en bloques de entre tres y siete plantas, la creación de una plaza de 5.000 metros cuadrados, un centro comercial de 12.000 m2 bajo este espacio público, un nuevo vial, amplias superficies ajardinadas y elevadores para salvar la pendiente del Casco Vello.