El mapa del paro en la provincia revela un mercado laboral muy desigual y fragmentado y sitúa a la ciudad de Pontevedra y al eje industrial Vigo-Porriño-Mos como las zonas que mejor están resistiendo las destrucción de empleo tras casi cinco años desde el inicio de la crisis. La ciudad olívica cerró enero con 34.955 desempleados y una tasa de paro del 22%. La cifra es dramática económica y socialmente por el volumen de población que representa. Pero pese a la creencia general de que Vigo es el ayuntamiento con peor comportamiento del sur gallego, si se aplica la lupa uno por uno a todos los concellos de la provincia, los datos demuestran que está muy por debajo de la media provincial e incluso figura entre las diez localidades de Pontevedra con menor tasa de paro en el mes de enero.

Por debajo del 23% de desempleo solo se encuentran la urbe olívica, Dozón -15%-, Rodeiro -15%-, O Porriño -18%-, Pontevedra -19%-, Silleda -19%-, Mondariz Balneario -20%-, Mos -21%- y Agolada -22%-. Los últimos datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) sorprenden a economistas, sindicatos y empresarios, que consideran necesario analizarlos en un contexto de fuerte movilidad laboral desde el entorno hacia Vigo, Porriño y Mos por concentrar la mayoría de la industria pontevedresa y centralizar la actividad naval y de la automoción que han dado trabajo históricamente a miles de personas de O Morrazo y Baixo Miño.

Aluden a esta interrelación para explicar que muchos ciudadanos de municipios limítrofes que antes trabajaban en Vigo ahora computan como parados de sus respectivos ayuntamientos de residencia, pero no es menos cierto que las estadísticas también cuando logran un contrato los contabiliza como ocupados de Cangas, Moaña, Baiona o Nigrán y no como contratados del textil, el comercio o el naval vigués.

A pesar de que la situación sigue siendo mala. La tasa de paro viguesa figura entre las más contenidas de la provincia y contrasta con el 30% de Redondela, el 33% de O Grove, el el 35% de Gongomar o el 40% de Cangas, Moaña o A Cañiza. Los municipios en situación más extrema son Covelo, Soutomaior, Portas, As Neves, Mondariz, Catoira, Pazos y Fornelos, que marca el récord con un 65% de paro.

En el verano de 2007 el número de parados en Vigo descendió por debajo de los 18.000, la cifra más baja de la historia local. La evolución siguió favorable hasta que en febrero de 2008 se puede dar por iniciada la crisis del empleo con un primer incremento de la tasa. Los datos de Vigo y de Galicia en su conjunto fueron siempre inferiores a los nacionales hasta que en 2010 por primera vez ambas curvas se cruzan. Cabe tener en cuenta que el índice de paro en Vigo casi siempre ha superado a la media gallega. Así se refleja en el libro pendiente de publicar "Hacia un cambio de modelo productivo en el Área de Vigo" editada por el Servicio de Publicaciones de la Universidad de Vigo y realizado en colaboración con Zona Franca. En su capítulo sobre censo de empresas y empleo explica que "Vigo ya tenía en 2004 una tasa de paro superior a la media de ciudades europeas entre 250.000 y 499.000 habitantes. Por lo tanto, pese a ser considerada una de las ciudades más dinámicas de Galicia, el desempleo es un componente estructural de la ciudad que se ha agravado durante la crisis", apuntan sus autores.

Vigo partía de cifras peores a las de otras ciudades y municipios gallegos y llegó a registrar una tasa de paro del 26,1% en el segundo trimestre de 2013. Desde entonces la destrucción de empleo se ha ido frenando hasta cerrar el último mes en un 22%. Este dato sitúa a Vigo como la segunda ciudad gallega con el índice de paro más elevado después de Ferrol, disparada con un 29%. Le siguen de forma inmediata Ourense con un 21%, Pontevedra con un 19%, y algo más lejos quedan el 18% de Lugo y el 16 y 14%, respectivamente, de A Coruña y Santiago, que son también las ciudades con mayor porcentaje de asalariados públicos y cuyas estadísticas son más estables.

Los funcionarios de carrera, personal laboral, interinos y eventuales que trabajan para alguna administración representan un 16,7% del total de asalariados de Vigo, porcentaje que en A Coruña sube hasta un 25% del total, y alcanza el 37% en Santiago de Compostela, capital gallega y sede del cuartel general de la Xunta de Galicia. Esta circunstnacia unida a la mayor incidencia de la crisis en la industria, especialmente en el naval, explica que Vigo registre un peor dato y una tasa de paro actual del 22%.