Miguel Lago, alumno del grado de Comercio, pretende implantar en Galicia el concepto del café para llevar o take away. Junto a unos amigos, restaura un antiguo motocarro vespa con el que se desplazarán a ferias o convenciones. "Es un nicho de mercado que aquí aún no existe. Nos acercaríamos a las personas, por ejemplo, a Balaídos o a Torrecedeira en época de exámenes. La idea es importar un café de Portugal o Brasil y distribuirlo con nuestra propia marca, Café la Parisienne", explica. El proyecto se le ocurrió durante una estancia como erasmus en Francia: "Trabajaba en un restaurante español y el café era la bebida con mayor margen de beneficio".