El skyline vigués ya se ha fijado una nueva cota en el horizonte que variará el panorama urbano de García Barbón. La parcela de La Metalúrgica, una de las principales zonas residenciales del centro la ciudad, será urbanizada con dos torres de 19 y 13 pisos de altura que se dedicarán a viviendas y oficinas. La sociedad ourensana Ifer, la misma que promovió la construcción de los dos edificios legalizados con el nuevo Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), ha proyectado una actuación similar a tan solo unos metros. El desarrollo depende ahora del Concello, cuyo departamento de Urbanismo ha comunicado a la promotora que no le concederá la licencia hasta que se resuelva la junta de compensación, compuesta por todos los propietarios, puesto que la parcela no es íntegramente suya. La tramitación ya acumula ocho años, pero es ahora, con la presentación del proyecto, cuando comienza por fin a desatascarse la actuación.

El volumen de edificabilidad que maneja Ifer para La Metalúrgica sorprende, especialmente en el contexto actual del sector de la construcción. Una torre de 19 pisos, otra de 13, un zócalo comercial de tres plantas, tres sótanos para aparcamiento... El arquitecto vigués Víctor Collazo y los ourensanos Roberto Rodríguez y Celso Rodríguez han sido los encargados de realizar un proyecto básico en el que la fachada de la vieja fábrica de latas de conserva juega un papel principal. El PXOM protege este singular elemento arquitectónico, únicos restos de una industria que funcionó hasta principios de la década de los 80, y el diseño inicial incluye la restauración de un tramo de 64 metros de fachada -el resto pertenece a la Tesorería de la Seguridad Social- para realzarla.

"Habrá que rehabilitarla íntegramente y la liberamos como un lienzo suelto con una zona verde que la separa del zócalo de los edificios", asegura Víctor Collazo, del estudio Broa Arquitectura. La restauración implicará también la retirada de todos los elementos colocados en las puertas y los ventanales, de forma que los huecos quedarán abiertos y se convertirán en accesos a los jardines que presidirán el bloque comercial.

18.000 metros

La parcela de La Metalúrgica tiene una superficie de 6.190 metros cuadrados y en el PXOM se permiten dos torres de 19 y 14 pisos, pero los arquitectos redujeron un piso en el edificio menor. "Nos pasamos de edificabilidad y bajamos una altura", señala Collazo antes de recordar que el documento urbanístico ha elevado hasta 2,70 metros la altura mínima de cada piso. La superficie total de las dos torres tendrá 18.000 metros cuadrados y el zócalo destinado a oficinas supone 4.000 metros del total. El documento urbanístico fija un uso residencial, aunque hay posibilidad de destinar espacio a terciario hotelero y general. Los dos inmuebles ofrecerán 121 viviendas (80 la torre grande y 31 la pequeña) y no es necesario, al no establecerlo el Plan Xeral, que se reserve vivienda protegida. Respecto a los sótanos, contarán con unas 160 plazas de aparcamiento en tres alturas, las correspondientes a una por cada vivienda y una por cada 100 metros cuadrados de las oficinas del bloque comercial.

Las zonas verdes suman unos 2.400 metros cuadrados, con una gran parte en el frontal que da a la calle García Barbón y el resto a la trasera de Serafín Avendaño. Precisamente, esta calle es otra de las actuaciones principales del plan, puesto que la promotora deberá encargarse de ampliar la calzada que discurre por detrás de la parcela. Se trata de unos 78 metros de vial que actualmente está taponado y que se utiliza como parking incontrolado.

La diferencia de cota entre García Barbón (9 metros) y Serafín Avendaño (22 metros) ha sido otro de los condicionantes a salvar en el desarrollo urbanístico. La solución encontrada por el equipo de arquitectos ha sido una zona ajardinada con escaleras en zig-zag que discurre en perpendicular desde García Barbón.

Durante la construcción de los edificios será necesario que la Consellería de Medio Ambiente realice catas para determinar si los suelos están contaminados por productos tóxicos utilizados en la vieja factoría siderúrgica. Los arquitectos explican que los sondeos arqueológicos determinaron que no existen restos pese a estar incluida en la zona del yacimiento romano de Areal.

La primera solicitud de licencia presentada por Ifer se remonta al 15 de abril de 1997, con el anterior plan en vigor y sin el planeamiento actual. Nueve años después, en septiembre de 2008, la promotora presentó su primer proyecto básico, pero no fue aceptado al incorporarse únicamente una de las dos torres. El departamento de Urbanismo denegó el permiso y reclamó el "proyecto completo de la totalidad de la parcela". Ahora, se ha presentado de nuevo con el plan para los dos edificios, pero a juicio de los técnicos municipales queda por resolver la junta de compensación. "El solicitante no es propietario del 100% del aprovechamiento que pretende materializar, ya que la parcela fue adjudicada en proindiviso, entre otros, al Concello de Vigo", argumenta Urbanismo. A mediados del mes de diciembre, la promotora respondió con el proyecto "corregido y refundido", por lo que está a la espera de la nueva resolución.

Tesorería

En la parcela colindante está previsto también que la Tesorería de la Seguridad Social, dependiente del Ministerio de Empleo, construya su sede en la ciudad. El pasado 19 de diciembre, la licencia de obra fue prorrogada por tercera vez por un periodo de seis meses. La construcción de las instalaciones, con una inversión estimada de 24 millones de euros, fueron anunciadas hace ya año y medio, pero el Consejo de Ministros todavía no ha dado su visto bueno para iniciar el proceso de licitación y adjudicación. La Seguridad Social compró la única nave de La Metalúrgica que actualmente sigue en pie, aunque la situación económica ha ido retrasando el comienzo de las obras.

La sede está proyectada en un edificio de nueva construcción con nueve plantas y otras dos bajo rasante. La primera prórroga se solicitó al surgir problemas técnicos que hicieron necesarios ajustes en el proyecto, entre ellos el retranqueo de la fachada. El solar fue adquirido en 2005 por la Tesorería a la Gerencia de Infraestructuras y Equipamientos de la Seguridad del Estado (Giese) por casi 11 millones.