Las tapas del Casco Vello tienen nueva reina soberana. La "tapiña regueifeira", creación del local A Regueifa, se alzó ayer con el primer premio de la octava edición del concurso de tapas de la asociación "Vigo Vello". En segundo lugar quedó el "brazo de piquillo relleno de gamba", de La Casa Roxa; y, en tercer puesto, la "hamburguesa de toro estofado" de La Sabrosa. Sus creaciones fueron galardonadas con un diploma y, en el caso de A Regueifa, con un premio especial. Una de las miles de personas que contribuyeron al concurso con su voto también recibió un fin de semana en una casa rural. Otros afortunados obtuvieron 25 premios de diferentes tipos.

El gran galardón del concurso fue, sin embargo, la enorme afluencia de público que atrajo a los locales. Itos Domínguez, responsable de la Asociación de Comerciantes y Hosteleros "Vigo Vello", calcula que a lo largo del mes de octubre se despacharon cerca de 30.000 tapas que participaban en el concurso. "Todo un éxito" que permite a la responsable hostelera hablar de la "mejor edición de todos los años". "Es el año en que mayor afluencia de clientes hubo", anota Domínguez, quien asegura que algunas jornadas los establecimientos lucían "abarrotados".

Al éxito contribuyó el buen tiempo con el que se inició octubre; pero también, y mucho, el empeño puesto por los negocios a la hora de diseñar sus platos. Ya a principios de mes Domínguez destacaba que, con 25 participantes, este sería el año con mayor número de concursantes. Entre los ingredientes empleados en los platos, destacan, por ejemplo, el queso de cabra de Arzúa, la harina de garbanzos, el solomillo de cerdo o los raviolis de calabacín. Otra clave del éxito de la cita fue su precio anticrisis: 1,5 euros cada tapa. "Algunos locales hasta han captado nuevos clientes", zanja Domínguez.