La Ley de Apoyo a los Emprendedores, publicada el 28 de septiembre en el BOE, es todavía muy reciente y por ahora la Asociación de Jóvenes Empresarios (AJE) no dispone de un muestreo que permita analizar sus efectos, pero la entidad sí considera positivas todas las medidas que se han adoptado para agilizar la apertura de negocios y la creación de firmas. "Hay que hacerlo fácil. Los retrasos provocan una serie de costes en cuestiones como asesoría y autónomos y si te permiten ponerte a trabajar sin esperas puedes obtener ingresos", comenta Rubén Hermida, el presidente de AJE en Galicia. Para el responsable del colectivo "todo lo que sea liberar de trámites y barreras a los emprendedores es bueno, tanto en la parte urbanística como en la mercantil y notarial". Hermida defiende que era necesario adoptar medidas para "lubricar los proyectos empresariales y adelgazar los trámites" y recuerda que hasta que se implantaron las facilidades en el procedimiento para obtener licencias de actividad "podías esperar tres o cuatro años hasta que te la concedieran". "Con los cambios mitigas la inseguridad jurídica", agrega. Aunque no se ha probado el impacto de la Ley de Emprendedores por ser aún pronto, la asociación considera que tendrá un efecto positivo para el impulso a nuevas iniciativas empresariales.