En plena caída del negocio, los meses de verano siguen revelándose como el auténtico motor de las autoescuelas. Solo entre junio y septiembre las academias de la ciudad facturan el 50% de su caja anual. Ese "filón" anima la Asociación Provincial de Autoescuelas de Pontevedra a aplaudir la decisión de la DGT de examinar a los alumnos en agosto. Tras un paréntesis de dos décadas la medida se recuperó en 2011, se continuó en 2012 y se mantiene ahora por tercer año.

"Antes los alumnos empezaban en julio y podían esperar para quitarse el carné hasta octubre; pero si ahora, con los nuevos calendarios, se eliminara agosto sería una hecatombe", anota Anxo Alfonso Bastos, responsable del gremio. Su tesorero, Jorge Rapado, coincide al subrayar la importancia del período estival. "El trabajo cada vez es más estacional; antes había gente que aprovechaba para quitarse el carné durante el año, pero ahora nada", anota. Según datos de la DGT en lo que va de agosto se presentaron a examen teórico 1.050 personas, 198 al de destreza y 748 al de circulación. En 2012 las tres pruebas sumaron 2.629 aspirantes y, en 2011, 2.601.