Disfrutar de un partido del Celta en compañía de una buena hamburguesa recién hecha, un "perrito caliente" humeante o, simplemente, un paquete de palomitas, ya no es un placer exclusivo del salón de casa. Ni siquiera de las cafeterías y bares. El estadio de Balaídos dispone desde el lunes -el servicio se estrenó la jornada ante el Espanyol, aunque ya se había avanzado en el Memorial Quinocho- de un nuevo servicio de restauración que remoza el "menú" a base de bocadillos del que se podía gozar hasta ahora. La nueva oferta coincide con un cambio al frente del catering del estadio: durante el próximo año la empresa gallega Don Pepe toma el relevo de la multinacional Sodexo, que había sido la encargada del servicio las dos últimas temporadas.

Los nuevos "fichajes" del menú no son las únicas novedades que percibirá el aficionado. A lo largo de los próximos meses la empresa pretende "repensar" el concepto de las 16 cantinas del estadio. ¿Cómo? Entre las novedades destaca, por ejemplo, abrir sus puertas una hora antes de cada partido y dotarlas de monitores de televisión en los que se reproducirán partidos y comentarios de Liga. "Queremos convertirlas en un espacio más confortable", concreta Camilo Lobato, director comercial del Celta, quien comenta que la llegada de Don Pepe "engancha con la filosofía del club": la apuesta decidida por "marcas líderes" y, al mismo tiempo, la "galleguidad".

"Vamos a poner a disposición de toda la afición la experiencia que Catering Don Pepe posee para renovar y actualizar el servicio prestado en las cantinas, abriendo antes y cerrando más tarde, para compartir con la afición las previas y comentarios posteriores al partido, preparar bocadillos calientes...", relata José Domingo González, responsable de la firma gallega. La empresa tuvo que hacer un esfuerzo notable para tener todo el material disponible a tiempo; pero, comenta González, se ha visto recompensada por la buena acogida de los aficionados. El grupo también ajustará sus precios.

Entre los planes que ya maneja el catering destaca instalar máquinas de vending que agilicen la venta y ahorren colas al cliente; o diseñar una oferta a medida del calendario. La idea, avanzan desde el grupo hostelero, es que el aficionado pueda disfrutar en otoño o invierno de productos apropiados para esa época, como cafés calientes o tazas de caldo. Lo que ya se puede paladear en Balaídos son sus empanadas y empanadillas.