El Concello de Vigo ha reabierto al tráfico esta madrugada la Avenida de Beiramar y Jacinto Benavente, viales cortados a la circulación después del incendio declarado el miércoles en la nave de Frigoríficos Berbés situada en la zona industrial de O Berbés. Las calles han estado cerradas al paso de vehículos durante dos días. La Policía Local habilitó un dispositivo especial de tráfico con más de 30 agentes para intentar canalizar la circulación hacia el centro por Torrecedeira y Pi y Margal. Desde Sanjurjo Badía en dirección a Bouzas el túnel estaba cortado y los vehículos que accedían por O Berbés eran desviados a la altura de la gasolinera de Beiramar hacia la calle trasera Instituto Oceanográfico.

El Concello ordena a los propietarios de Frigoríficos Berbés la colocación de una valla lateral de al menos tres metros de altura para evitar desprendimientos, el "desmontaje inmediato" de la cubierta y el vaciado del inmueble para prevenir accidentes. La mayor propagación del fuego se produjo en las antiguas cámaras de hielo ubicadas hacia el lateral de la calle Severo Ochoa. Esta fachada es la que presenta mayores daños y tendrá que ser parcialmente derribada. El colapso de la cubierta y la deformación de la estructura de hormigón detectada por los técnicos de Urbanismo tienen su origen en los 900 grados de temperatura que llegaron a alcanzarse en el interior de la nave.

El gobierno local ha abierto una investigación para conocer las causas del "virulento fuego". El alcalde anunció ayer que se solicitará información a los Bomberos, a los arquitectos que inspeccionaron el inmueble y al Puerto para "esclarecer las condiciones de la concesión y las actividades desarrolladas en el edificio". Abel Caballero concluyó tras visitar la zona que un segundo incendio en una nave "teóricamente" abandonada "debe ser estudiado".

El fuego se dio por extinguido a las siete y media de la tarde del miércoles, pero los efectivos continuaron en la zona hasta la mañana del jueves para enfriar los restos. Los técnicos de Urbanismo detectaron en su inspección "riesgo de desplome" en la fachada lateral de Severo Ochoa, por lo que el jueves se mantuvo cortado al tráfico este vial, una parte de Jacinto Benavente y la avenida de Beiramar. Por segundo día consecutivo volvieron a producirse importantes retenciones en el entorno.

"El objetivo más importante ahora mismo es recuperar la circulación pero se detectó riesgo de derrumbe y antes hay que levantar un panel de tres metros de altura para aislar el riesgo en caso de que se produzcan desprendimientos", explicaba el regidor por la mañana. El Concello contactó con los propietarios de la nave de cuatro plantas para que asumieran las medidas de seguridad ordenadas por Urbanismo y tendrán que costear el derribo parcial del inmuebler

Caballero subrayó que los bomberos se enfrentaron "a un incendio severo" debido a la acumulación en el interior de materiales inflamables como corcho, caucho, aceites y chatarra. La cámara termográfica de los Bomberos de Vigo llegó a registrar 900 grados en el interior de la nave. Estas elevadas temperaturas explican que una de las paredes laterales cediese y se produjese una dilatación "de entre 25 y 30 centímetros", según fuentes municipales.

El informe de la Gerencia de Urbanismo da 24 horas a la propiedad para asegurar la estructura y permitir la reapertura del tráfico. Tiene una semana exacta para presentar el proyecto de derribo bajo advertencia de multas coercitivas "de 300 a 6.000 euros". El Concello declaró la "ruina inminente parcial" de la edificación 73 de Beiramar para agilizar el desmantelamiento de las partes dañadas sin necesidad de obtener licencia municipal. Según pudo saber FARO, el inmueble había superado la ITE en diciembre de 2010.

La información que Frigoríficos Berbés S.A. ha facilitado al Concello es que se estaba "intentando desalojar" la nave y deshacerse de maquinaria tras entrar en concurso voluntario de acreedores en 2012. La firma creada en 1964 para la elaboración de productos del mar congelados cerró en enero de este año y se encuentra en fase de liquidación.