El 44% de los menores de la ciudad que salen de marcha consumen alcohol, tabaco u otro tipo de droga, pero la gran mayoría asegura que no es el motivo que los empuja a ir de fiesta. Junto al de encontrarse con los amigos (93%), hay otra razón predominante en la elección de su ocio: la necesidad de "desconectar de la rutina".

Romper con la monotonía o con el estrés de su vida de estudiante es uno de los argumentos alegados por nueve de cada vigueses (88%) de entre 14 y 17 años, en el estudio elaborado por la Asociación Ciudadana de Lucha contra la Droga Alborada dentro del Proxecto Creative.

Los adolescentes sitúan a la música como otra de las razones que los incita a correr juergas. Sobre este aspecto, hacen una clara distinción con respecto a la actitud que adoptan hacia ella. Para algo más de la mitad de los marchosos (el 53%) es "importante o muy importante" escucharla, mientras que solo un tercio también considera primordial bailarla.

El ligoteo se queda relegado a un cuarto puesto en el ranking de las motivaciones de los púberes. La exponen menos de la mitad de los encuestados (el 48%), pero todavía es menor el porcentaje de los que buscan algo más que una relación pasajera en esta práctica de ocio. Apuestan por ella para encontrar pareja el 20% de los adolescentes vigueses.

Como última razón figuran las drogas. Solo un 7% de los encuestados introduce el consumo de alcohol, tabaco o estupefacientes como uno de los aspectos relevantes que los motiva a ir de fiesta. "Es muy positivo que el principal motivo para salir se el de la socialización, y que haya un bajo porcentaje que dice que lo hace por las drogas", analiza Jesús Cancelo, psicólogo clínico y director de Alborada, aunque advierte de que la fiabilidad de estas cifras es relativa ya que se basa en la sinceridad de los jóvenes encuestados.