El juzgado de Violencia contra la Mujer de Vigo retomó ayer por la mañana su frenética actividad con una juez sustituta, la misma que tuvo que suspender su actividad la víspera cuando a media mañana la Audiencia le comunicó que no le correspondía trabajar, que no le iban a pagar el día y que el relevo de la magistrada titular correspondía a la de Instrucción 7 que estaba de guardia.

Los juicios por malos tratos se suspendieron, pero dos de ellos con detenidos tuvo que celebrarlos la juez de Instrucción 7, lo que colpasó el juzgado de guardia al sumarse a la media de docena de detenidos del fin de semana a los que tomar declaración.

La Audiencia autorizó ayer la contratación de la juez suplente durante un día para asumir la gestión del Juzgado de Violencia, ya que hoy es festivo y por tanto no se trabaja, y mañana se reincorpora la magistrada titular tras una licencia por estudios.

La juez sustituta celebró ayer cuatro juicios por malos tratos con detenidos, y firmó dos órdenes de alejamiento para dos posibles maltratadores. la jornada laboral que comenzó sobre las 9 de la mañana, se prolongó hasta pasdas las 15.30 horas. Los dos juicios rápidos suspendidos el lunes se celebrarán mañana, ya con la titular.

No es el primer trastorno que causa en Vigo la eliminación de los jueces sustitutos debido a una de las reformas de Alberto Ruiz Gallardón. La semana pasada, también en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer se vivió el mismo problema: la titular estaba de permiso y ante la falta de sustituto hubo que suspender declaraciones a víctimas de maltrato y testigos. La suplencia la correspondía a la magistrada del juzgado de guardia, pero dada la carga de trabajo que ya tenía en su propia sala le fue imposible atender todos los procedimientos que había en la de violencia machista.

La restricción de jueces suplentes obliga a que los titulares tengan que sustituirse entre sí en bajas, descansos o vacantes que no superen los 15 días. Esta situación ya obligó a aplazar declaraciones en este mismo juzgado de Violencia en febrero y a suspender una docena de juicios en Social al no poder acudir la juez porque estaba enferma. El nuevo sistema por el que los magistrados titulares se sustituyen entre ellos hacen inevitables las suspensiones de juicios. "Con la actual carga de trabajo solo podemos asumir las causas urgentes del compañero. No podemos llevar dos juzgados a la vez", apuntan varios magistrados.