O se eliminan todas las subvenciones a aerolíneas en Galicia, o se le dan -y se permite dar- también a Peinador. Ésta es la postura que defiende el comité de personal del aeropuerto vigués y cuyos miembros se reunieron ayer con el alcalde, Abel Caballero. "A nosotros nos valdría competir libremente. Nada de ayudas públicas a nadie. Pero está claro que si a los demás se le dan subvenciones nosotros también las necesitamos. En la situación actual es imposible competir con Santiago, Oporto o A Coruña", arguye el presidente de los trabajadores, Antonio Carrera.

El comité de empresa lamenta que los números de pasajeros en los aeropuertos gallegos está "totalmente adulterados" por la subvención que la Xunta otorga a Ryanair en Lavacolla desde 2005. Critican que ésta es una de las principales consecuencias de la pérdida de viajeros de Peinador. Aunque asumen que la crisis también está detrás de la caída, razonan que si esa fuera la única consecuencia el resto de aeropuertos respondería prácticamente igual. Y no está siendo así. "La situación del aeropuerto de Vigo se está poniendo negra. La desaceleración económica afecta, pero las subvenciones en otras terminales está quitándole más gente. Lo ideal sería que se retiren todas las ayudas, pero si se mantienen las actuales reglas del juego en Santiago y A Coruña, lo único que pedimos es que se nos deje tener las mismas. Jugar igual que el resto", solicita Carrera.

El temor de los más de cien empleados de Peinador se multiplica en proporción a la caída de la demanda del aeropuerto. Temen que el aeródromo pueda llegar a caer por debajo de los 500.000 pasajeros y que esto lleve al Ministerio de Fomento a un recorte del horario operativo de la terminal, como ya aconteció en ocho aeropuertos españoles. "No sabemos que hará el Gobierno este año, pero a tenor de la evolución y de las previsiones actuales, Peinador se quedará en el entorno de los 600.000 pasajeros y estamos preocupados con lo que pueda pasar", admiten, temerosos, los empleados.

Y mientras la plantilla de Peinador reclama el fin de las ayudas públicas en Santiago para que la terminal viguesa pueda competir en igualdad de condiciones, el alcalde, Abel Caballero, sospecha que se mantendrán. "El conselleiro de Infraestructuras (Agustín Hernández) dijo categóricamente hace seis meses que las ayudas a Ryanair no se iban a mantener. Él y Feijóo proclamaron que no había que darlas y que distorsionaban la competencia y que no cancelaban el contrato con Ryanair porque ya estaba firmado. Y ahora que se avecina el momento de la extinción les entran las dudas", critica el alcalde. "Están montando todo esto para mantener las ayudas a Ryanair en Santiago porque si no lo hacen y la aerolínea se va, Lavacolla no es capaz de competir con el aeropuerto de Vigo y se va a hundir", considera.

Con respecto a la posición de los empresarios, que reclaman una mayor coordinación de los tres aeródromos gallegos y una especialización de Peinador, Caballero les ha recomendado "que se dejen de pamplinas y defiendan Vigo, que es su trabajo, y no rendir pleitesía sumisa a Núñez Feijóo".