Investigadores de la Escuela de Minas coordinados por Javier Taboada han firmado un acuerdo con la empresa que explotará el yacimiento de oro de Corcoesto, en A Coruña, para asesorarla en el cumplimiento de las medidas correctoras y protectoras fijadas por la Xunta, que ya emitió una declaración de impacto ambiental positiva, así como dar "solución científica" a los problemas que surjan "antes, durante y después de la vida útil de la mina".

El proyecto de la canadiense Edgewater ha generado el rechazo de la Sociedad Galega de Historia Natural y otros grupos ecologistas, que basan sus críticas precisamente en una investigación desarrollada en la Universidad de Vigo, concretamente en el grupo de Trazas que dirige Carlos Bendicho, en colaboración con Ricardo Prego, del IIM-CSIC. Sus estudios detectaron elevada presencia de arsénico en el río Anllóns como consecuencia de la antigua actividad minera, una contaminación que podría agravar la nueva explotación.