Vigo perdió 91.945 visitantes en cinco años. El sector turístico atraviesa uno de sus peores momentos y la estadística publicada ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) así lo corrobora. El número de viajeros que llegaron a la ciudad entre enero y noviembre de este año descendió un 25% con respecto al mismo periodo del año 2007. La crisis le ha costado a la ciudad olívica uno de cada cuatro turistas de tal forma que durante los once primeros meses de 2007 se contabilizaron 375.582 viajeros y la cifra ha caído en el presente ejercicio a 283.637 personas.

Esto arroja una media de 7.500 visitantes menos cada mes, aunque analizado el balance de forma pormenorizada se puede observar que el verano resiste mejor, con un 18% de descenso en julio y agosto, empeorando el balance durante la temporada baja, cuando se pierden casi nueve mil visitas en relación a hace un lustro.

La crisis está poniendo a prueba el tirón turístico de Vigo y pese a que la tendencia general es a perder visitantes extranjeros y reforzar el turismo de proximidad, en el caso de Vigo retroceden un 26% las visitas de nacionales frente al 22% de originarios de otros países. El único dato positivo porque repercute de forma más directa en los ingresos de los hoteles es que durante estos últimos cinco años se ha incrementado la estancia media de los viajeros de 1,73 a 2,03 noches.

En este lustro la ciudad ha ganado medio millar de plazas de alojamiento -pasó de 4.566 a 5.120- y este aumento de la oferta unido a que se reducen las visitas causa una bajada de la ocupación de 36,4 a 25,8%.

Las estadísticas mensuales del INE apuntan a que 2012 cerrará como el peor año para el sector turístico vigués desde que en 2005 se empezaron a registrar cifras por localidades. Los 283.637 turistas recibidos por Vigo hasta noviembre suponen un descenso del 1% con respecto a 2011, pero la brecha se abre un 6% si la comparativa se hace con 2010 y supera el 20% en relación a 2008, cuando se produjeron los mayores descensos.

El último informe del INE publicado ayer certifica además que la pérdida de visitas está siendo más acusada en las ciudades que en pequeñas localidades costeras. Esto explicaría la reducción del 25% de visitantes sufrido por Vigo en un lustro y el todavía mayor 27% registrado en A Coruña, frente a la mayor resistencia mostrada por las Rías Baixas en su conjunto, que vieron reducir su tirón en un 11%.

Las urbes se llevan la peor parte con descensos también muy por encima de la media gallega. La comunidad perdió un 15,8% de turistas hasta noviembre al contabilizar la llegada de 3.054.089 millones de visitantes frente a los 3.537.361 que sumaba a estas alturas en 2007.