Los usuarios caen a la mitad
La huelga de Vitrasa se salda sin acuerdo ni incidentes
Unos 40.000 vigueses, el 50% de un día laborable, no se subieron al autobús urbano - Los sindicatos impugnaron los servicios mínimos

Varios pasajeros se disponen a embarcar a mediodía de ayer en Urzáiz. // Marta G. Brea
ANTONINO GARCÍA
Molestias, muchas molestias para los usuarios, como es habitual en estos casos, pero ningún incidente reseñable ni un atisbo de acuerdo entre las partes. La huelga convocada por los trabajadores de Vitrasa para forzar a la concesionaria del transporte urbano a sentarse a negociar un nuevo convenio solo repercutió ayer en el desplazamiento de los viajeros a la hora de acudir al trabajo, a la escuela o a las compras. Los vigueses decidieron utilizar este lunes otros medios y no hubo percances de importancia, tal y como reconocieron trabajadores y empresa.
Vitrasa informó a media tarde de que sus cálculos apuntan a una disminución de 40.000 personas, la mitad de los pasajeros que utilizan el autobús durante un día laborable. "Esta reducción se suma a los cerca de 600.000 usuarios perdidos desde enero a noviembre de 2012, lo que se traduce en un 3,21 por ciento menos que en el mismo periodo del año anterior", explicó la concesionaria en un comunicado.
La compañía apuntó que "los servicios mínimos se cumplieron al 100%, con retrasos en algunas líneas debido a las especiales circunstancias de la jornada". Los sindicatos, por su parte, decidieron impugnar los servicios mínimos al considerar que no cumplían lo pactado. El acuerdo era establecer un 40 por ciento durante las franjas de mayor demanda y del 25 por ciento en las "horas valle", las de menor uso, pero los trabajadores detectaron irregularidades. "Han eliminado once líneas, las de menor utilización, y mantienen el resto, las más rentables, cuando deberían mantenerlas todas y reducir el porcentaje en cada uno", explicaba Narciso Pazos. En cualquier caso lamentaron la "falta de audiencia" por parte de la empresa y del Concello a la hora de establecer los servicios mínimos. "Han puesto los mismos que cuando Corina Porro era alcaldesa", señalaron desde el comité al entender que un regidor socialista tendría "más en cuenta" la opinión de los sindicatos. Precisamente, desde Vitrasa esgrimen una sentencia del Juzgado Contencioso-Administrativo de Vigo, correspondiente a la última huelga de trabajadores del transporte urbano en la ciudad, en la que se consideran los servicios mínimos "procedentes y adecuados".
El comité de empresa realizó a lo largo del día varios actos reivindicativos en las propias cocheras de San Andrés de Comesaña y en la Praza do Rei, frente al Concello, y al finalizar la jornada mantuvo que los paros se repetirán los días 26 y 29 de noviembre. Los trabajadores reclaman un convenio que contemple un incremento salarial del 1 por ciento, 25 días laborables de vacaciones o que se paguen las horas extra en tarifa distinta a la normal (10 euros). Vitrasa tiene más de 300 trabajadores, de los que 270 son conductores de bus.
Santiago Domínguez, portavoz municipal del BNG, instó ayer a la empresa a que se siente a dialogar con el comité de empresa. "En este sentido indicó que para el Bloque las demandas de los trabajadores son demandas absolutamente razonables". Por su parte, José Manuel Figueroa, portavoz del PP, reclamó al alcalde que intervenga en la huelga.
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