Cuando en febrero de este año recibió la comunicación del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INNS) de que procedían a retirarle la pensión de viudedad además de exigirle la devolución de lo que cobró en los últimos cuatro años, Lucía A.V. ya sospechaba que alguien debía estar detrás de este nuevo calvario que debía afrontar en la última etapa de su sufrida vida. Y sus peores temores se confirmaron ayer en el juicio, cuando la abogada del INNS reveló que había sido "la propia hija de la demandante" la que puso sobre aviso al organismo estatal. Así se entiende que de repente le retirasen una ayuda que cobró durante 25 años. "Yo no le deseo ningún mal pero ella a mí parece que sí", confesaba Lucía, muy impactada por volver a sentarse en el banquillo.

Al juicio también asistió la coordinadora de la Red Vecinal de Mujeres contra los Malos Tratos. Rosa Fontaíña criticó que en la retirada de la prestación "no se tiene en cuenta que fue una persona maltratada durante toda la vida", y denunció que el INNS actuase de igual forma que cuando le retiró la pensión a un ourensano condenado por la muerte de su mujer y un hijo.