La Policía tiene la "sospecha razonable" de que el radar solo falla con los Vitrasa

El radar que cazó a un autobús de Vitrasa a la "imposible" velocidad de 130 km/h por la Carretera de Valladares –como adelantó ayer FARO– descubrió fallos en el funcionamiento de este aparato que la Concejalía de Seguridad es incapaz de precisar. Tras chequear la operatividad del cinemómetro durante toda la mañana del miércoles, la Policía Local solo puede afirmar que "existe una sospecha razonable" de que los errores se producen únicamente con autocares de la concesionaria del transporte urbano en Vigo.

El día de la revisión del radar, según fuentes de la jefatura local, "se realizaron tres mediciones con tres autobuses diferentes de Vitrasa". En todos los casos el resultado fue el mismo: fotografiaban al autocar a una velocidad muy superior a la real. Las citadas fuentes no aclaran si las pruebas también se llevaron a cabo con turismo, ya que los conductores multados hasta ahora por ese radar podrían impugnar las sanciones si se demuestra que el cinemómetro falla con estos vehículos.

Para despejar todas las dudas, agentes de la Policía Local desinstalaron ayer el polémico radar de la cabina de Valladares para enviarlo al Instituto de Metrología, "donde se realizarán pruebas de laboratorio y donde tratarán de detectar el fallo", avanzan desde la jefatura local.

La "sospecha" de que los Vitrasa disparan la velocidad captada por el radar recuerda a algunos casos igual de sorprendentes ocurridos en España. En junio de 2007, un autobús de las líneas urbanas de Bilbao acabó retratado por la cámara de un cinemómetro ubicada en la autopista a la desorbitada velocidad de 235 km/h. La posterior investigación de la Ertzaintza reveló que 20 radares desplegados en el País Vasco "fallaban con vehículos largos".

Para el abogado vigués experto en Tráfico, Abraham Tenoira, el hecho de que se hayan descubierto fallos en la actividad del radar de Valladares "justifica la revisión de todos los desplegados en la ciudad. Es lo que debería hacer el Concello para curarse en salud", argumenta.

"Que nos contrate Ferrari", bromean desde la empresa

Juan Carlos Villarino, director general de Vitrasa, acabó ayer convertido en protagonista involuntario en varios informativos nacionales que se hicieron eco de la noticia publicada por este periódico. En Antena 3 incluso bromeó con la velocidad atribuida por el cinemómetro de Valladares a uno de sus autocares: "Esperamos que Ferrari nos contrate para hacer el transporte".

La compañía mostró ante las cámaras el tacógrafo del autobús fotografiado a 130 km/h, y que indica que durante todo ese día no superó los 60 km/h. Además, Villarino subrayó que "es imposible" que un Vitrasa circule a la velocidad denunciada "puesto que el motor se corta a los 90 km/h".