Varios miles de personas han recorrido este mediodía las calles de Vigo en la manifestación convocada por los sindicatos UGT y CCOO en defensa del empleo, la dignidad y los derechos.
La marcha, la más multitudinaria de las dos celebradas hoy en la ciudad, junto a la convocada por la CIG, partía pasadas las 11,30 horas de la intersección de las calles Vía Norte y Urzáiz, para finalizar en la plaza de la Estrella.
En declaraciones a los medios, José Cameselle, responsable de CCOO en Vigo, ha destacado que "no es verdad" tal y como señala el Gobierno central "que después de los recortes, venga el crecimiento".
Ha expuesto que, pese a que se hablaba de que "la creación de empleo vendría a partir de 2013" esto no será cierto "hasta 2016". En todo caso, ha reclamado al PP que "reaccione a tiempo" y que "cambie su política económica".
"Vamos a seguir con las movilizaciones contra las medidas del Gobierno central", ha vaticinado Cameselle, quien ha expuesto que "a pesar de que la situación es complicada, existen soluciones".
Por su parte, Antonio Juste, responsable de UGT en la ciudad, ha señalado a los periodistas que "la situación cambia cada vez a peor" y que los recortes del Ejecutivo central van a ser tantos "que no le van a llegar todas las semanas de lo que queda de mandato para hacerlos".
"Vivimos el peor momento de la clase trabajadora, donde el Gobierno quiere transformar a los trabajadores en empleo y destruir el estado de bienestar", ha señalado Juste.
Asimismo, el líder sindical ha subrayado que "el que no tenga dinero, tendrá que vivir de la beneficencia".
Ha censurado que el Gobierno central "está destrozando el trabajo" y ha previsto "nuevas medidas que van a contraer la economía", como la subida del IVA en 2013.
"Paga igual el IVA el señor Botín que el niño que compra las chucherías", ha comentado Juste.
En esta manifestación, a la que acudieron personalidades políticas como el alcalde socialista de Vigo, Abel Caballero, o la secretaria segunda de la Mesa del Congreso de los Diputados, Carmela Silva, no faltaron globos negros o una lápida con fotos del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo y del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, con el lema 'Sanidad pública, educación, empleo, DEP'.
MANIFESTACIONES EN EL RESTO DE GALICIA
Millares de personas han salido hoy a la calle en Galicia en las distintas manifestaciones convocadas este reivindicativo 1 de mayo, marcado por las protestas contra la reforma laboral y los ajustes del Gobierno. Un año más, los sindicatos han decidido convocar manifestaciones por separado en las distintas ciudades y villas, aunque tanto CCOO y UGT -que calculan en 125.000 personas los asistentes a sus marchas- como el sindicato nacionalista CIG han elegido A Coruña para celebrar sus actos centrales. En esta ciudad la protesta más multitudinaria fue la convocada por UGT y CCOO, al congregar a más de 30.000 personas, una cifra que la Policía Local ha rebajado a 14.350.
Bajo el lema "Trabajo, dignidad, derechos. Quieren acabar con todo", la marcha ha partido pasadas las 12:00 horas de la plaza de la Palloza y en ella han participado representantes políticos del PSdeG, encabezados por su secretario general, Pachi Vázquez. También fue multitudinaria la manifestación de la CIG, a la que asistieron unas 10.000 personas, según el sindicato, y 2.300, según la policía local. A esta marcha se sumó el secretario general, Xesús Seixo, y dirigentes nacionalistas como el portavoz en el Congreso, Francisco Jorquera.
Otra respuesta mayoritaria a las concentraciones se celebró en Ferrol, donde 13.000 personas, según la policía local y varios miles más según los convocantes, se sumaron a la protesta de los sindicatos estatales, y a la de la CIG, por separado. Tras la pancarta de CCOO salieron a la calle cerca 8.000 personas, aunque los sindicatos cifraron la asistencia en unas 20.000 personas, en una de las marchas más numerosas del último lustro, en plena crisis del sector naval en la ría ferrolana. Mientras, la CIG congregó a más 5.000 personas, según fuentes oficiales, en una movilización paralela que arrancó en la avenida de Esteiro, una protesta que el sindicato calcula mayor.
En Santiago, la plaza de Praterías se llenó en dos ocasiones con el intervalo de una media hora, con las protestas que, por separado, celebraron CCOO y UGT y la CIG. La primera de las marchas fue secundada por miles de personas, que partieron de la Alameda con consignas como "Esta reforma la vamos a parar", "más inversión y menos recortes", o "¿La culpa de quién es: de los que votan al PP", mientras también hubo gritos en favor de una huelga general. Esta marcha, a la que asistieron dirigentes socialistas como el exalcalde compostelano, Xosé Sánchez Bugallo, diputados y concejales, así como miembros de Izquierda Unida, concluyó en la praza de Praterías, donde se leyó un manifiesto común. La protesta de la CIG, también multitudinaria y a la que se sumaron dirigentes nacionalistas como la portavoz del BNG en el Parlamento, Ana Pontón, entre otros dirigentes, clamó igualmente en favor de una huelga general.
En Pontevedra, en torno a 6.000 personas han marchado por la ciudad en las dos manifestaciones convocadas. Las actividades organizadas por el Ayuntamiento con motivo de los 'maios', los chubascos intermitentes y el puente no impidieron una asistencia considerable a las marchas. La manifestación de la CIG, a la que como es habitual asistió el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, y también el portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez, terminó con llamadas a replantearse el papel de la Unión Europea y críticas al Gobierno por su postura respecto al sector naval. En la marcha de UGT y CCOO, el portavoz de este último sindicato, José Luis García Pedrosa, llamó a la unidad sindical para futuras actuaciones. "No hay razones para que no se dé", dijo,
En Lugo, alrededor de un millar de personas, según los sindicatos -unas quinientas para la Policía Local-, participaron en la protesta de CC.OO y UGT, que recorrió un tramo de la Ronda da Muralla -la vía perimetral que rodea el monumento romano-, entró en el casco histórico por la puerta de San Fernando, pasó por las plazas de San Marcos, Santo Domingo y Maior y terminó su periplo en la de Armanyá, frente a la Subdelegación del Gobierno. La convocada por la CIG, secundada por unas 400 personas, partía media hora más tarde y siguió un trazado diferente, para terminar también en un lugar distinto, la Praza da Soidade.
Mientras, en Ourense, los asistentes han sido unos 3.600, según datos de la Policía Local, se han sumado a las concentraciones, la más numerosa la de los sindicatos de implantación estatal.
