Una obra de arte nacida de un testamento. La Concatedral da Santa María estrenará en la procesión del Corpus Christi de mañana un expositor para el Santísimo Sacramento financiado con el legado que el fiel Ramón Areses Pérez cedió a la Asociación Adoración Nocturna cuando falleció hace seis años.
Se trata de una pieza de orfebrería de 80 kilos de plata confeccionada por la empresa madrileña Artes Granda por encargo de la Diócesis. "Es una aspiración muy antigua de la ciudad de Vigo, que carecía de ostensorio, y no podíamos permitirnos pagar su coste", explicó ayer el presidente diocesiano de la Adoración Nocturna, Joaquín García Comesaña. De hecho, el importe del templete que se inaugurará mañana asciende a los 150.000 euros, y se costeó con la donación testamentaria del "adorador" y otras aportaciones parroquiales. "Desde hace algún tiempo se había encargado y se estaba realizando, por sugerencia de Monseñor Diéguez y apoyado después por el actual obispo, Monseñor Quinteiro", relató García. El párroco de la Concatedral de Santa María, Moisés Alonso Valverde, también celebró la adquisición de la pieza. "En esta pantalla procesional se funden el amor de Dios y el amor de los feligreses. Por eso, no hay que pensar en si cuesta mucho o poco: el amor no tiene precio", manifestó.
El expositor tiene como finalidad custodiar el Santísimo Sacramento y facilitar su transporte durante las procesiones. "Hasta ahora los sacerdotes tenían que llevarlo en la mano y la gente apenas podía verlo", recordó el presidente de Adoración Nocturna. A partir de mañana harán falta 12 braceros para soportar los 160 kilos que pesa en su totalidad, por lo que incorpora dos varales móviles de madera, adornados con aplicaciones de plata repujada.
Un representante del taller donde se elaboró el ostensorio, Álvaro Pozo, hizo hincapié en que la pieza "fue elaborada íntegramente a mano". La "obra de arte", como lo denominan los citados miembros de la comunidad eclesiástica viguesa, está soportada por ocho columnas platerescas con una ornamentación muy elaborada que plasma las representaciones de la tradición católica y hace referencia a la simbología propia de Vigo. En ese sentido, en la cúspide se alza una imagen de la Asunción, patrona de la ciudad olívica, elevada por ángeles.
Incluso el interior del templete fue trazado con la máxima meticulosidad, y luce un relieve de Dios Padre y el Espíritu Santo, reservando ese espacio para la Santísima Trinidad "con la presencia de Cristo en la custodia". Además, una pequeña medalla en la parte posterior de la talla recoge el nombre de Ramón Areses Péres, el particular "gracias al que se financió la obra, para que quede para siempre en el recuerdo de los fieles y de la ciudad".
Estreno de la "obra de arte"
La presentación en sociedad de la pieza de orfebrería se realizará mañana con motivo de la procesión del Corpus Christi. "Quizás los seminaristas de San José lo saquen de la Concatedral a la calle", apuntó García, tras una celebración eucarística a las 20.00. Así, se prevé que a las 21.00 horas doce portadores saquen el Santísimo Sacramento del templo para que les tome el relevo una docena de miembros de la asociación Adoración Nocturna. "Es todo un orgullo estrenarla y llevarla", señaló su presidente.
