El primer satélite made in Galicia ya está preparado para ser lanzado al espacio. A falta de las últimas pruebas que se realizarán en las próximas semanas en el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial de Madrid (INTA), los investigadores vigueses que se han ocupado del diseño y montaje custodian el ingenio en la Escuela de Telecomunicaciones a la espera de la fecha oficial de lanzamiento, que se materializará, según las previsiones de la Agencia Espacial Europea (AEE), en los últimos meses del año.

Con un volumen de 10 cm3 y apenas un kilogramo de peso, el Xatcobeo ha cumplido en cada una de sus fases idénticos protocolos y exigencias que los requeridos por la Agencia Espacial Europea (ESA) a los satélites de mayor tamaño. Hace solo unas semanas, los ingenieros enviaron las últimas credenciales a esta organización antes de que se conozca la fecha del despegue, en total, más de 160 documentos que justifican su funcionalidad y seguridad.

Uno de los requisitos del proyecto ha sido la construcción de una cámara limpia en la Escuela de Telecomunicaciones para la construcción y montaje del satélite y, antes de los modelos definitivos de vuelo, los ingenieros tuvieron que verificar réplicas exactas de los paneles solares que desplegará una vez en órbita, el computador, los diferentes sensores o el sistema de radio.

El equipo vigués espera ahora la llegada inminente de un aparato de pruebas procedente de la universidad californiana de Calpoly, la cuna de los cubesat, esto es, un tipo de microsatélites diseñados con fines educativos e investigadores y a cuyos parámetros responde el Xatcobeo. Dado que son los inventores de esta tecnología, Calpoly ha firmado un contrato con la ESA para verificar todos los ingenios e integrarlos en el cohete Vega.

De esta forma, los expertos se desplazarán en breve desde el campus a las instalaciones del INTA con este instrumental y el satélite para realizar los análisis pertinentes. "Cuando el cohete es lanzado, el satélite experimenta vibraciones a causa de los motores, variaciones en la temperatura e ingravidez. Se reproducirán todas las condiciones más desfavorables para garantizar que el satélite sigue funcionando y no produce ningún daño", explica el coordinador del proyecto, Fernando Aguado.

El Xatcobeo viajará a Madrid protegido en un maletín estandarizado –el medio de transporte aún está por decidir– y, a su regreso, permanecerá en la cámara limpia hasta su lanzamiento al espacio desde la Guayana francesa.

En cuanto los expertos conozcan la fecha exacta, el montaje de todos los elementos del microsatélite se efectuará "en 48 horas".