A ningún pasajero de Peinador se le pasó por alto la presencia ayer del Antonov 124-100M estacionado junto a los hangares de Bomberos. Como adelantó FARO, el aterrizaje del segundo carguero más grande del mundo en el aeropuerto de Vigo en la noche del martes se debe al embarque de una mercancía muy especial: lanchas de apoyo a la flota gallega en Mozambique. Esta operación de carga comenzará hoy y, previsiblemente, se prolongará varios días.

Las embarcaciones que se introducirán en la enorme panza de la aeronave fueron construidas por Neumáticas de Vigo S.A (Neuvisa), filial del Grupo Rodman ubicada en O Rosal. El contrato firmado por esta empresa incluye diez lanchas semirrígidas de doce metros de eslora y 4.500 kilos de peso cada una. Pero no caben todas en un solo Antonov de esta categoría, por lo que a partir del día 16 se embarcarán el resto en otro aparato del mismo modelo.

La voluminosa estructura de estos supercargueros –miden de ala a ala 73,3 metros frente a los 68,96 de largo– genera gran expectación cuando realiza las maniobras de aterrizaje y despegue. Pero más que el peso que desplaza (hasta 150 toneladas) y su autonomía (puede volar de Canadá a Irlanda sin repostar) llama la atención por la flexibilidad de su fuselaje. Tanto la proa como la popa se abre por completo para poder acoger en su bodega toda clase de mercancía sin importar su volumen. Así hizo el Antonov 124 que en 2005 descargó en Peinador los nuevos helicópteros del Servicio de Gardacostas de la Xunta.

La filial logística de Iberia en Vigo dirigirá la operación de carga de las lanchas semirrígidas. Ya estaban preparadas para embarcarlas ayer pero a última hora se abortó el dispositivo por "problemas técnicos", según fuentes aeroportuarias, que garantizaron la maniobra para hoy. Lo que no está claro es cuándo despegará este supercarguero de Peinador rumbo al país africano. Las mismas fuentes recuerdan los "continuos cambios" surgidos con su aterrizaje y ahora indican incluso que la estancia del aparato en Vigo podría demorarse hasta el domingo.

Entretanto, los seis tripulantes del Antonov dedicaron el día de ayer a descansar. No aparecieron por el aeropuerto vigués y en el avión tampoco se registró ninguna actividad, aunque, según las citadas fuentes, "todo está preparado para el operativo de carga". En este sentido, la plantilla de Aena ha recibido instrucciones de la dirección para que colaboren "al máximo" con los responsables de la mercancía.