El gobierno municipal de Vigo mantiene en trámite el expediente de demolición de los aparthoteles de Samil, sobre los que pesa una sentencia de derribo, mientras que los propietarios de los mismos han mostrado al concejal de Urbanismo su "convencimiento" de que el juzgado enviará en unos días una notificación para paralizar ese proceso. El edil José Mariño (PSOE) ha explicado este martes en rueda de prensa, tras reunirse con los afectados, que éstos han presentado un recurso de casación y confían en que el juez paralice la ejecución de la sentencia de derribo en tanto no se resuelva ese recurso.

Además, tienen la esperanza de que haya una notificación al respecto esta semana, habida cuenta de que el próximo 29 de enero concluye el plazo dado por el Ayuntamiento para el corte de suministro y desalojo de los inmuebles. Mariño ha explicado que, en tanto no haya una orden contraria por parte del juzgado, el Ayuntamiento mantendrá el proceso de derribo, cuyo proyecto ya está elaborado y que se adjudicará próximamente por valor de dos millones de euros. "Si llega otra notificación del juzgado, la acataremos", ha puntualizado.

Asimismo, ha puntualizado que, pese a que los afectados han constituido una empresa --a la que han cedido la gestión de sus propiedades-- en un intento de legalizar la situación de los aparthoteles, todavía falta documentación por presentar y, en todo caso, "es imposible que este viernes tengan licencia". "El verdadero problema es la división horizontal, allí no se permite el uso residencial colectivo", ha añadido. Según Mariño, en el registro del Ayuntamiento constan 62 personas empadronadas en esos aparthoteles, en un total de 31 viviendas --de las más de 80 que hay--.