Una furgoneta pierde los frenos y se empotra contra el escaparate de una peluquería

Una furgoneta impactó ayer contra el escaparate del centro de estética “So Chic”, sito en la esquina de las calles Álvaro Cunqueiro y Pintor Colmeiro.

El choque se produjo alrededor de las 7.00 horas, cuando el vehículo, un Mercedes 120 que “se cree que transportaba frutas y verduras y se encontraba de reparto” -según informó la encargada del local, Carolina Lagoa-, colisionó “primero contra la valla” que separa la acera de la calzada y “después con el escaparate de la peluquería”.

Lagoa explicó que la conductora de la furgoneta, que “bajaba por la calle Pintor Colmeiro” y se disponía a tomar la curva en dirección a Camelias, perdió el control del vehículo en el cruce con Álvaro Cunqueiro “porque le fallaron los frenos”.

Tanto la conductora, de 37 años, como su acompañante, también mujer y de 20 años, -ambas de nacionalidad senegalesa-, sufrieron daños leves y fueron trasladadas en ambulancia al hospital de Fátima.

La encargada aseguró que “parecían estar bien, no tenían cortes ni sangraban”.

Esta misma dijo que “fue una vecina del inmueble”, en cuyo bajo está situada la peluquería, la que se percató del suceso, “al escuchar un ruido muy fuerte sobre las 6.45 horas de la mañana y avisó a la Policía Local”. Además de los agentes, que se pusieron en contacto con los encargados del centro a las 7.00 horas, se personaron en el lugar del impacto Atestados y una unidad del 061, que se encargó de trasladar a las dos ocupantes hasta el hospital.

“Tardaron casi una hora en sacar la furgoneta y atender a las chicas que iban dentro”, explicó Carolina Lagoa. Tanto ella como otros tres compañeros estuvieron más de 5 horas esperando a que “taponasen” la entrada al centro porque “podría entrar cualquiera” y llevarse las existencias o el material de peluquería.

“Acabábamos de cambiarlo”

La encargada estimó una cuantía de “6.000 o 7.000 euros en daños, si no más, sumando el aluminio, las puertas, los cristales o las lámparas, entre muchas otras cosas; solo el cristal principal cuesta 600 euros, y lo acabábamos de cambiar porque hace un mes nos lo rompieron unos chicos lanzando cosas una noche de fiesta”, continuó.

Teniendo en cuenta que dentro de 4 días se celebra la Nochevieja y las peluquerías y centros de estética acostumbran a llenar el cupo de clientes, Lagoa dijo que “en dos días el local tiene que estar arreglado, antes de que llegue fin de año”•