La Unión Europea financiará con 2,6 millones de euros una iniciativa completamente gallega para reducir las emisiones contaminantes del transporte marítimo.

El proyecto, conocido como TEFLES, está liderado por la empresa viguesa INOVA, consultora especializada en gestión de innovación y mejora de procesos, y cuenta con 11 socios pertenecientes a seis países europeos.

Por la parte gallega, participan, además de la mencionada compañía, la Autoridad Portuaria de Vigo, VICUS Desarrollos Tecnológicos y el astillero Hijos de J. Barreras.

La puesta en marcha del proyecto tiene un coste de 4 millones de euros, de los cuales 2,6 serán aportados por la Unión Europea.

El innovador proyecto, que comenzará a ejecutarse en enero del próximo año y finalizará en diciembre de 2013, permitirá reducir entre un 15 y un 35 por ciento la emisión de CO2 en el mar, dependiendo del tipo de buque.

Además de los organismos y empresas gallegas, participan en la iniciativa representaciones de otros cinco países europeos, en concreto de Francia, Holanda, Alemania, Reino Unido y Turquía.

Según una nota de prensa remitida por INOVA, el proyecto TEFLES forma parte del VII Programa Marco de inversión en I+D puesto en marcha por la Unión Europea, en la modalidad de Transporte dentro de la vertiente de Cooperación.

Subraya el comunicado la importancia de haber obtenido la ayuda comunitaria, toda vez que fueron muy numerosos los proyectos presentados para optar a las ayudas.

El que lidera la compañía gallega INOVA tiene como finalidad "la búsqueda y desarrollo de las mejores tecnologías en los buques y puertos, dirigidas a reducir el impacto sobre el medio ambiente del transporte marítimo, al igual que el coste que tiene para las compañías armadoras.

Por lo tanto, el objetivo es conseguir la reducción del tiempo de viaje y el consumo de combustible, y en consecuencia, los gastos y las emisiones contaminantes, tanto en ruta como en las operaciones de entrada al puerto y de carga y descarga".

Pretende también la construcción de escenarios y modelos que permitan a los armadores tomar decisiones sobre el uso y acondicionamiento de los barcos en relación a los costes-beneficios y al potencial de reducción de emisiones.