El titular del Juzgado de Instrucción 7 condenó ayer a dos jóvenes acusados de las pintadas que aparecieron en seis oficinas bancarias de Traviesas en las que se pedía que la crisis la pagaran los bancos y no los trabajadores. La multa rondará mil euros, cantidad que costó limpiar las pintadas, según los bancos personados. La fiscal solicitó la suspensión del juicio de faltas ya que no habían sido citados los policías locales que les detuvieron en octubre de 2009 y que les intervinieron botes de pintura, según el atestado impugnado por las defensas, que también recurrirán la sentencia dictada "in voce" tras la vista. En el exterior del juzgado una decena de jóvenes del colectivo "Briga" mostraba su apoyo a los dos acusados con una pancarta.