La Consellería de Mar lamentó ayer el accidente en el que falleció la vilagarciana pero recuerda que los submarinistas están obligados a tomar una serie de medidas de protección que en este caso parece que no se cumplieron de forma adecuada. Estas prevenciones a la hora de bucear es no hacerlo nunca sólo, sino en pareja para evitar que uno pueda perderse o quedar enganchado en una red,como le ocurrió a Beatriz García Fernández. Otro elemento indispensable, señalan desde Mar, es un cuchillo que en este caso serviría para cortar la malla de los trasmallos. La Consellería todavía no ha recibido una solicitud formal de reunión por parte de los submarinistas,pero asegura que el Servizo de Gardacostas está cumpliendo a la hora de controlar los horarios de calado de los trasmallos o de retirar aquellos que se encuentren ilegales o en zonas prohibidas. Lo que no pueden hacer es controlar las salidas de los barcos en sus puertos de origen como piden desde la Federación Galega de Actividades Subacuáticas. En el caso de la excesiva presencia de redes en los fondos de la ría de Arousa,Mar entiende que es imposible distinguir su presencia, por lo que pide la colaboración de los submarinistas para que denuncien su presencia en caso de no contar con ningún tipo de señalización, al igual que aquellas que segaron la vida a Beatriz García Fernández. En caso de localizarlas, el protocolo de actuación es muy sencillo, entrando en acción el Equipo de Mergullo de Gardacostas para proceder a su retirada, como están realizando en los últimos tiempos.