Sin diferencias de estatus. Así se celebran las comuniones en la parroquia del Cristo de la Victoria, donde todos los niños reciben este sacramento "cortados por el mismo patrón", literalmente. Esta iglesia de Coia presta a todos los escolares una túnica blanca de forma gratuita con el objetivo de facilitar el acceso a la primera comunión a todos los pequeños, independientemente del poder adquisitivo de sus familias. Es más, la parroquia no permite a los niños acudir a la ceremonia con una vestimenta diferente. "Hacemos esto para facilitar las cosas a la gente con menos recursos", explica el párroco Juan Antonio Terrón.

Aunque esta peculiar iniciativa en Vigo ya surgió hace años, en los tiempos que corren, si cabe, cobra más relevancia debido a las dificultades económicas que sufren tantas familias de la ciudad.

Terrón explica que las túnicas se van modernizando con el paso del tiempo y actualmente existen dos modelos diferentes. "Aunque aparentemente parecen iguales, tenemos uno más ajustado que otro", señala el sacerdote. Como complemento, todos los niños llevan un crucifijo de madera.