El grupo municipal del Partido Popular ha iniciado una investigación sobre la compra, por parte del gobierno local, del edificio del pazo de la calle Abeleira Menéndez, por un importe de 1,7 millones de euros sin IVA, para ubicar la nueva pinacoteca de la ciudad.
Los populares alertan del excesivo precio que se estaría pagando por el inmueble, a tenor de lo que cuestan otros edificios en el Casco Vello. Los concejales del BNG –partido del que depende la adquisición– consideran, sin embargo que "el expediente es totalmente claro y la tasación ha sido realizada por una consultora especializada para no dar lugar a suspicacias", señala el edil de Patrimonio Histórico Eudosio Álvarez, que fue el que realizó la negociación.
La compra efectiva, con la firma de la escritura, aún no se ha hecho efectiva. El inmueble –considerado como el segundo pazo de mayor antigüedad de Vigo– soporta una hipoteca de unos 500.000 euros desde que fue adquirido por su actual propietario en el año 2003, según consta en el expediente municipal. Ello impide que se lleve a cabo la firma del contrato, ya que debe estar libre de cargas.
El inmueble es propiedad de la sociedad Zinnia S.A. cuyo apoderado es Francisco Vázquez Blanco, un conocido empresario que se dedica a los negocios inmobiliarios y de ocio, entre otras actividades, y que es propietario también de otros edificios en el Casco Vello. Esta sociedad se hizo con el inmueble en 2003 y ahora lo vende al Concello, de acuerdo con "la tasación más baja" –según el BNG– que realizó la sociedad Tynsa.
Pese a que la compra se hizo pública, en la última reunión de la junta de gobierno quedó el expediente sobre la mesa ya que la valoración realizada debe ser cotejada por un técnico municipal. Un informe que aún no ha sido analizado por la junta de gobierno, pese que el grupo del BNG manifiesta que está ya redactado y es favorable a la tasación realizada.
El PP puso de manifiesto una antigua relación laboral hasta 2007 de uno de los actuales asesores de la Tenencia de Alcaldía con el propietario del inmueble, aunque el BNG deja constancia de que ese extremo no está relacionado en absoluto con la adquisición del pazo. "La relación con el propietario ha sido la normal en estos casos. Pedimos una tasación independiente y con la cantidad más baja negociamos con el dueño y de ahí no nos hemos movido", señaló Álvarez, que insistió: "Un procedimiento que, por cierto, vamos a aplicar en otras compras, porque el Concello carece de un tasador oficial".
"No entendemos cómo se quiere empañar una operación que es totalmente clara y limpia. A lo mejor les molesta que lo hagamos bien", dijo una portavoz de Tenencia de Alcaldía.
