Los profesores de la Escuela Oficial de Idiomas de Vigo siguen en pie de guerra. Su encierro en las instalaciones de Martínez Garrido continuó ayer en señal de protesta por la aplicación de la circular 5/2009, una nueva propuesta de la Consellería de Educación para estos centros a la que se opone el personal docente. La Xunta argumenta que existen 1.120 plazas libres en la escuela de Vigo (498 de inglés, 514 de francés y 100 entre japonés y chino), unas cifras que comparte la directora de la EOI, aunque matiza que "quedan esas vacantes sólo de mañana" y por la tarde quedaron fuera 700 personas. "Los alumnos son adultos, que trabajan o estudian. Así que las horas más demandadas son las tardes y noches; por eso se debe ofertar la docencia en esa franja horaria. Ofrecer 1.500 por la mañana es, en el peor de los casos, demagógico, y, en el mejor, inútil. Le ruego a la administración que solucione el problema y no haga un brindis al sol", defiende la directora, Cristina González.

Al encierro, en el que participó prácticamente todo el profesorado (compuesto por 96 personas), se sumaron algunos alumnos, que permanecieron en el centro hasta las tres de la madrugada. Los estudiantes ya consiguieron un millar de firmas en contra de la circular, y seguirán recabando apoyos hasta el próximo miércoles. El jueves entregarán las rúbricas al director xeral Mira Lema. Pese a la protesta, que finalizará esta noche a las 22.00 horas, las clases de desarrollaron "con total normalidad", incluso se celebró un Consello Escolar. Con lo que no contaba la dirección y el profesorado era con la visita de un inspector de Educación.

La Xunta sostiene que la circular "optimiza los recursos docentes", mientras que la dirección dice que "hay recortes que deterioran la calidad de la enseñanza".