Vecinos del barrio de A Seara, junto a López Mora, denunciaron ayer la existencia de un vertedero ilegal junto al parque, en una parcela de propiedad particular. El terreno, con fuerte pendiente, está lleno de bolsas de basura y desperdicios de todo tipo, como neumáticos, vallas de obra, sofás, colchones y hasta una silla de ruedas, entre otros muchos residuos.

Los afectados señalan que la situación empeoró hace un mes cuando se desbrozó el terreno y se retiraron las enredaderas que lo mantenían cubierto. "Entonces apareció toda la porquería aunque cada día aparece más", apunta una de las vecinas de los edificios cercanos, Josefa García. "Cada día paseo aquí a mis perros y como se me escapen y se metan por ahí, salen llenos de porquería", lamenta.

Lo mismo pasa con los niños que juegan en la pista deportiva ubicada justo al lado de la finca. "A los chavales se les escapa el balón muchas veces y tienen que meterse en medio de toda esa basura, con el riesgo de salud que eso supone", apunta otra de las vecinas, María Jesús Filgueira.

Y es que tanto ellas como otros de los afectados señalan que ratas de gran tamaño corren a sus anchas por el lugar por lo están convencidos de que la zona se ha convertido ya en un "foco de insalubridad". Un problema que se ve aumentado por el agua encharcada en la parte más baja que desprende un desagradable olor. Además, el problema aumenta porque, apuntan los vecinos, hay algunos de los habitantes de los edificios que lindan directamente con la parcela que tiran las bolsas de basura "por la ventana".

Por ello, instan al Concello a que obligue a los propietarios de la parcela a limpiarla "como manda la normativa municipal porque ya lo hicieron en otros lugares". "Esto es una vergüenza y como no se solucione, va a ir cada día a peor", sentencian.