Luz verde al Presupuesto Municipal para el próximo año. Las cuentas del Concello se aprobaron ayer con los votos favorables de los concejales del Partido Socialista y del Bloque Nacionalista Galego. El Partido Popular se pronunció en contra. Para el visto bueno del documento,que asciende casi a 227 millones de euros (ocho menos que en 2008), fue necesario el voto de calidad del alcalde, ya que la edil socialista Chus Lago no estaba en la sala al encontrarse de expedición en el Polo Sur.

La concejala de Hacienda y Economía, Raquel Díaz, destacó que los presupuestos prevén una inversión total de 21 millones de euros.“Son los mejores para un momento de crisis como el actual, y la partida de inversión es la mayor de la historia”, enfatizó la concejala socialista. En el documento se reservan nueve millones para humanizaciones y tres para el CascoVello.

Díaz aseguró que el número de alegaciones presentadas fueron escasas y tachó de“pantomima de maquillaje político” las presentadas por el Partido Popular, que fueron rechazadas. La edil del PP, Lucía Molares,criticó la “falta de inversión”.Además, cargó contra el gobierno local por aprobar un presupuesto“del despilfarro que da las espalda a la crisis”y en el que“se prima la publicidad, asistencias técnicas, celebraciones y propaganda”.

El teniente de alcalde, por su parte,rechazó también las alegaciones del Partido Popular. “Si sumamos todas las partidas que el PP cambia nos da 4.320.000 euros. Una cifra que sólo representa el 1,95 por ciento de todo el presupuesto”, dijo Domínguez.

El nacionalista defendió las cuentas asegurando que son “fiables, seguras y solidarias y con capacidad de respuesta en tiempo de crisis”. Se desmarcó del “despilfarro”del que les acusa el Partido Popular y defendió las partidas reservadas para fiestas,“ porque en tiempos de crisis los vecinos también quieren lugares de encuentro”,enfatizó.

Vecinos

Por otra parte, la Federación de Vecinos Eduardo Chao criticó ayer la decisión del Concello de dedicar la totalidad de los fondos estatales del plan anticrisis a obras de humanización.

“Dedicar la totalidad del dinero a obras mientras muchas personas malviven e pasan hambre, nos parece mirar para otro lado y olvidar las necesidades de base de la ciudad”,lamentan.